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Suena la alarma y me despierto, me siento en la cama, volteo a ver mi tobillo y está muy hinchado y también morado.

<<Hay no, no puede ser verdad>> Digo desde mis adentros, veo la hora y aún es algo temprano, le dejo un mensaje a Omar diciéndole que no creo poder ir a clases el día de hoy, el me responde al instante, me pregunta que si necesito algo, le digo que no y así nos pasamos unos mínimos intercambiando mensajes.

—¡Ya estás despiertaaaaa!— Grita Fer.

—Ya y no iré a clases hoy— le devuelvo el grito.

—Esta bien, ya me iré, Francisco me viene a recoger, nos vemos luego, si necesitas algo me llamas.

—Esta bien— le digo mientras sigo viendo mi tobillo todo inchado, no puedo creer solo una caída haya causado tantas cosas, la verdad no me duele, pero si se ve feo, me vuelvo a la cama y me duermo.
 
  Estoy en un cuarto muy oscuro y silencioso, veo entrar a Omar, Karla y Fer.
Fer me voltea a ver y sale de la habitación, solo se queda Karla y Omar, que se van acercando a mi, ellos se quedan a unos metros de mí y se empiezan a reír de mí los dos, empiezo a llorar, mientras veo que ellos se van y me dejan solo en ese cuarto...

Suena el teléfono, no sé porque pero he tenido sueños así últimamente, no todos son iguales, pero siempre acabo sola, creo que tengo miedo a estar sola o algo así, no sé porque, si todo el tiempo me la he pasado sola, Edgar ha sido prácticamente mi único novio, nunca he necesitado de nadie para estar bien.

—Sofi, ¿Estas bien?— Escucho decir a Omar por el teléfono, suena muy angustiado.

—Si, ¿Por qué no lo estaría?

—Te he llamado varias veces y no respondes el teléfono— me dice con un tono que parece mi mamá, la última vez que escuché algo así tenía como 16 años, estaba en un fiesta y la verdad se me fue la hora solo tenía permiso hasta las 2 am y cuando vi la hora eran las 4am y tenía como mil llamadas perdidas de mi mamá.

No respondo nada, veo el teléfono y tenía 6 llamadas perdidas de él.

—En serio Sofía Alejandra— Sigue diciendo.<<Sabe perfectamente que el nombre de Alejandra no me gusta para nada>> Está exagerado las cosas.

-Ya Omar no pasa...

-No, nada Sofía, voy para el departamento- cuelga el teléfono.

Pero que le pasa, apenas no he respondido algunas llamadas, no es para que se ponga así, Omar y yo tenemos pequeñas peleas constantemente, pero esto ya es otro nivel.
Escucho que están tocando la puerta, me levanto a abrirla, la verdad si puedo caminar, creí que no podría hacerlo, abro la puerta y entra Omar.

-Creo que mañana ya podré ir a clases- Le digo intentando olvidar lo de hace un momento.

-Oye, ¿Por qué te enojaste cuando no te respondí?- le sigo diciendo.

-Sofia, me preocupo por ti, creí que te había pasado algo- me dice y cambia totalmente la cara que traía cuando entró, ahora se ve muy sensible.

-Pero estoy bien, no hay de que preocuparse- le digo intentando que no se sienta que tengo una responsabilidad sobre mí.

-Ya estoy grande y la verdad no es como que me haya pasado nada grave ya estoy bien y mañana vuelvo a clase- le digo.

-Está bien Sofi, pero te vendré a buscar- Me dice mientras saca unas cosas de una bolsa, al parecer trajo comida china.

-Está bien, como usted mande- le digo mientras hago unas señas en señal de que el manda y los dos nos echamos a reír.

-Claro- dice- Yo mando aquí- se ríe.

-Por cierto, Karla te andaba buscando hoy- se lleva un poco de comida a la boca.

-¿Y que quería?

Hace unas señas con el hombro y cabeza en señal de que no sabe.

-Pues mañana hablaré con ella- añado

Ni amor ni odioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora