Cuentan que hubo un tiempo en el que no habían estrellas en el cielo y la luna se sentía sola. También cuentan que el bosque un pequeño conejo quedó huérfano en un trágico incidente. Todas las noches la luna miraba al blanco conejo vagar solo por el bosque y todas las noches antes de dormir el conejo miraba la plateada luna sola en el cielo. Mientras más pasaba el tiempo más triste y solos se sentían y hubo una noche donde la luna no soportó más su tristeza y decidió ahogarse en un lago cerca de la madriguera del conejo. Este observó lo que sucedía y decidió socorrer a la luna, pero que podía hacer un simple conejo para sacar a la luna de un lago. Luego de ver cómo lo único que le daba alientos para seguir se hundia decidió que lo mejor era seguir el mismo camino que había tomado su única compañera. Así que saltó hacia el lago sin ganas de seguir viviendo, pero sin darse cuenta calló sobre su amiga, esta al sentir el calor del pelaje, la suavidad de sus pequeñas patitas se llenó de alegría, tanta que acendío hacía el cielo pero esta vez con un amigo, el cual la acompañaría hasta el fin de los días.
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El conejo y la Luna
Short StoryPequeña versión personal de la historia del conejo de la Luna