Me llamo Liv, aunque la gente me llama Black.
Yo, soy Nick y conozco a Liv desde hace diez años, aunque ella no lo sepa.
Una situación complicada hizo que Liv y Nick se encontraran cuando tenían doce y catorce años. Al pasar diez años se vuelven a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Entre en casa pensando aun en aquella noche y en todo lo que vino después, no soy una persona que no cumpla lo prometido, así que ese asunto después de diez años aun me re carcome por dentro, no había dejado de pensar en que fue de ella.
Fui directamente a hablar con Jack
-Jack- dije su nombre para llamar su atención
-que te pasa compañero? Estas blanco
-la he visto- dije
-a quien?
-a ella, te acuerdas de la chica? La salve cuando teníamos catorce años, la he visto hoy en la universidad
-enserio?-dijo alucinado-bueno al menos esta bien, si está en la Uni no debe de estar tan mal no?
- no está en la Uni matriculada, la he visto pasando droga, ella sigue con eso, y yo no llegue a tiempo
- joder, que mierda, pero oye, no fue tu cumpla, no llegaste a tiempo porque no te dejaron, eras un mocoso, que querías?
- debí salvarla, se lo prometí-conteste enfadado conmigo mismo
-llevas 10 años con eso, basta ya, a de mas estas seguro de que es ella? Han pasado diez años estará cambiada- dijo alzando las manos al aire
- no la olvidaría aunque viviera 100 vidas, era ella- confirme
- y que vas a hacer? Vas a ir a decirle "hola soy yo el tipo que no pudo salvarte hace 10 años como te encuentras?"- dijo con burla
- hablare con ella y haré lo que sea- finalice
- como quieras, si necesitas ayuda- dijo tendiéndome una mano amiga
- gracias- se lo agradecía, pero esto es un tema que debía solucionar solo
- por cierto, Rubén quiere aprender a usar la katana, iré con Rome a enseñarle- explico
-no me parece una buena idea que el niño de dieciséis que a de mas es tu hermano aprenda a usar una katana, pero como vais a hacer lo que os dé la gana lo único que te pido es que no matéis al niño- dije subiendo a mi habitación
-eso intentaremos- respondió mi amigo
De camino a la habitación, me cruce con mi otro compañero Rome
-donde te metiste ayer? – pregunte con tono picaron
- ya sabes que las nenas no pueden vivir sin su ración diaria de Rome- comento señalándose a si mismo
- Ya ya, no quiero saber más
Me metí en mi habitación, para no pensar en nada mas decidí escuchar un poco de música, después de comer Jack y Rome se fueron con Rubén a lo de la katana, Luck y yo nos quedamos en casa, repasando algunos puntos de nuestro siguiente trabajo.
