Love Me [◇JinTae/TaeJin◇]

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Cuando finalmente apartaron el arma de su cuerpo, Soo Yun se dio cuenta de que todavía seguía tensa. Con las manos firmes en sus muslos, se sentó derecha y aguardó por el sujeto que estaba detrás del escritorio de espaldas a ella. La habían llevado a un pequeño sector similar a una oficina. Después de dejarla en la silla y decirle que debía hablar con aquel hombre, todos se marcharon.

Finalmente, el hombre volteó en su silla giratoria. Estuvo ocupado revisando un monitor que estaba ahora en negro. Era calvo y tenía una mirada filosa.

—Soo Yun. Perdona a Kang, seguramente te asustó con sus formas poco... convencionales de invitarte a venir.

Ella hizo una mueca.

—No fue ninguna invitación. Yo lo llamaría secuestro.

Dahir sonrió, enseñando todos los dientes.

—¡Bien dicho! Me gustas bastante, veo que eres tal y como te describieron —dijo más para sí mismo que para ella—. Puedes llamarme Dahir. Estoy al mando de Unique, una organización que trabaja como consultora para la policía coreana. Por favor, relájate. Ninguno de nosotros te hará daño.

—Eso es difícil de creer luego de viajar durante media hora con un arma apuntando a mi cabeza además de quitarme mis pertenencias en la entrada —contestó. De nada le serviría mostrarse asustada, además Dahir ya lo sabía.

—Lo entiendo, tienes toda la razón. Kang trabajó muchos años como sicario, ya sabes, viejas costumbres que no se pierden —hizo sonar sus nudillos con un movimiento con ambas manos—. En todo caso, sé que te estás preguntando quienes somos y por qué estás aquí hoy. Verás —Dahir empezó su habitual paseo explicativo, el cual consistía en caminar de un lado a otro por la oficina mientras hablaba—. Estás aquí porque eres una pieza importante en el tablero. ¿Te gusta el ajedrez?

—¿Disculpa?, ¿Cómo que pieza importante?

—Por tu trabajo. Eres prostituta.

Ella intentó no perturbarse. Que aquellos hombres conocieran su nombre demostraba que tenían bastante información sobre quién era.

—¿Y por qué una prostituta sería una pieza importante en tu tablero?

—Porque lo que Unique está intentando es desmantelar el negocio de tus jefes —dijo sin más—. Nuestro objetivo es el club donde estás trabajando actualmente. Conoces a esta señorita, ¿no es así? —tomó una fotografía del cajón del escritorio y se la enseñó.

Soo Yun vio a la Princesa de Taehyung en la imagen.
—Sí.

—¿No es adorable? Parece una jovencita sin mucha personalidad —Dahir miró la fotografía un momento—. Es linda, y a juzgar por el brazalete de su muñeca, su familia tiene dinero. Ella es como un estereotipo. De la joven mujer de clase alta que tendrá que lidiar con la fortuna y los problemas de su apellido. A simple vista, no parece más que eso.

—Trabaja con ustedes, ¿cierto?

—¡Acertaste! —sonrió—. Es una agente de Unique. Hizo bien su papel, admítelo. Ni siquiera tú creías que pudiera hacer algo, pero no te culpo. ¿Qué podría hacer una señorita de apariencia tan frágil además de lucir vestidos de diseñador y sonreír? —guardó la fotografía y volvió su atención a Soo Yun—. Nos brindó información. La información suficiente como para saber quienes son los dos extranjeros al mando, y cómo montaron su burdel. No lo hizo sola, si te lo estás preguntando. Tuvo ayuda de un muchacho —ahora le enseñó otra fotografía.

—Lo he visto alguna vez, sí. Pero nunca pidió estar conmigo.

—No debería. Se supone que su compañera y él se dividirían al personal que trabaja en el club. Él debería haber hablado con Min Jae —le dijo.