Stripper (Creek)

Unica parte

Las luces del lugar eran tan brillantes que tenía que entrecerrar sus ojos, en especial cuando los láseres apuntaban directamente a su cara. No quería decir que odiaba estar ahí, pero probablemente, lo hacía.
Su boda tendría lugar el día 28 del mes, es decir, faltaba al menos una semana, por lo que sus amigos (aka. Token, Clyde y Jimmy) pensaron que sería prudente entrar a su habitación sin permiso, arrastrarlo contra su voluntad de las mangas de su suéter favorito, y subirlo al auto del moreno con los ojos vendados hasta dar con una discoteca de dudosa procedencia como "despedida de soltero".

Sabía que si su pareja se enteraba, lo mataría. Pero ya estaba ahí, casi sujeto por las garras de sus amigos, que lo obligaban a "divertirse" por última vez antes de convertirse en un hombre hecho y derecho dedicado a su familia. Al menos, Token en su infinita benevolencia había invitado los tragos, pidiendo rondas del mejor alcohol que el club de mala muerte tenía. Clyde lo animaba a beber sin medida, y Jimmy intentaba animar su humor con los mejores chistes, cuidadosamente seleccionados para esa noche.

Y que noche.

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¿Había dejado la comida para cuyo al alcance de Stripe? Pensaba un Craig, más que moderadamente borracho, mientras veía pasar a algunos stripers sin pena ni gloria por la gran pasarela del lugar. Ninguno llamaba particularmente su atención. El quería jurar que le sería fiel a su futuro cónyuge hasta con la mirada, pero como si sus amigos se dieran cuenta, lo animaban a ver con comentarios subidos de tono acerca de las piernas y el trasero de un tal chico pelirrojo. Lo miró: no tenía gracia.

Quiso imaginarse al amor de su vida enfundado en ese traje tan revelador, pero simplemente no pudo. Estaba mareado, no pensaba con claridad, y si trataba de concentrarse, solo podía verlo con su ropa común, esa que tanto le gustaba y que olía a detergente del caro, como a brisa primaveral.

— Te traje aquí para mirar culos, no para que te pusieras a pensar en dejaste la estufa prendida, Tucker — la calmada voz de Token Black lo sacó de su divagación mental, parecía reprenderlo pero mantenía la simpatía en su tono y apariencia. — ¿Todo bien?

— Ya me arrastraron hasta aquí, deja que me divierta como yo quiera. — Respondió, mostrándole el vaso de vodka que sostenía, dejando en claro que era su único interés.

— Como quieras, hasta Clyde parece disfrutarlo más...

— Entonces ya sabes a dónde traerlo cuando sea su turno de casarse. — Reprendió, con falsa molestia.

— Amigo, dudo que eso pase...

Clyde soltó un molesto "¡hey!", interrumpiendo el hermoso momento donde dejaba un triste billete de un dólar en la tanga del pelirrojo, para enfocarse en la platica de sus amigos.

— Si las mujeres saben lo que les conviene, me buscarán — Soltó, completamente confiado.

Craig iba a, naturalmente, llevarle la contraria por tal comentario, cuando las luces de todo el lugar comenzaron a parpadear y cambiar de colores, haciendo la vista más molesta, su ebriedad era palpable. El espectáculo principal estaba por comenzar, y el DJ, que antes había presentado a todos los y las stripers que habían caminado por la pasarela, intentaba llamar la atención de los presentes. "I Like It" de Cardi B sonaba en el lugar, pero con un volumen más bajo, para dar introducción al show.

— Amigos, sean bienvenidos estas noche al Peppermint Hippo, espero que estén disfrutando de nuestros strippers en este sábado mixto, y como saben, llegó la hora del evento principal de la noche. No olviden dejarle una buena propina a este grandioso DJ, y bueno, para ustedes, la estrella de la noche, ¡¡Coffe bean!!