Su familia no la quería, no la valoraba a Tanya no le importaba pues ya se había acostumbrado a tal trato, junto con su perro rocky bailaban en el río que estaba serca de " la guarida " como le decían. Apesar de tan solo convivir con su amigo fiel, Tanya sentía que no le faltaba nada más en su vida, ya que ella misma cosechaba y cazaba su comida.