Capítulo 9

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Hoy es mi primer día aquí, el vuelo duró dieciocho horas, al principio fue lindo ver el atardecer y todo lo demás pero era la primera vez que volaba por tantas horas y la verdad me duele todo, nunca había pasado sentada tanto tiempo, la turbulencia fue peor que en cualquier otra ocasión y a la señora que estaba junto no le cayó bien su cena. En fin, terminamos llegando aquí a la media noche y al ir bajando del avión rápidamente me fui percatando de varias cosas, todo estaba despejado a nuestros costados, pero al mirar hacia arriba se podía observar un cielo inmenso lleno de estrellas que brillaban más que nunca, a lo lejos estaban los grandes edificios y mucha luz a pesar de la hora... sabía que el clima iba a ser frío porque aún es invierno pero en serio está perforando mis huesos, tengo puesto una blusa, un abrigo, una chamarra, guantes, jeans, medias, gorro y bufanda y aun así tengo frío.

En realidad, tan rápido como llegamos al aeropuerto y bajamos del avión, sentí el impulsivo frío atravesando rápidamente mi ropa, adentrándose por mis poros hasta hacerme estremecer, y entonces recordé algo que tiempo atrás había leído; la lavanda es una flor muy hermosa, colorida y fragante que resiste de manera extraordinaria a cualquier clima. Su carácter silvestre le permite adaptarse muy bien a cualquier terreno. Es realmente increíble lo poco que pide a cambio del delicado y agradable aroma que produce. Por lo que, así como la lavanda yo también quería volverme alguien resistente a los distintos climas que estaba por vivir en Tokio y así mismo sobrevivir en cualquier terreno en el que tenga que estar.

Los de Stigma me acompañaron todo el vuelo y ahora me estaban guiando del aeropuerto hacia la residencia de la academia, un lugar dónde un número limitado de estudiantes de Stigma podían alojarse hasta acabar sus estudios en la misma. Dentro de las instrucciones e información que me dieron antes de venir aquí, me enteré de que Stigma es un lugar en dónde jóvenes talentos del patinaje artístico sobre hielo de todo el mundo llegaban a practicar. La academia es la más grande y reconocida a nivel mundial, físicamente está divida en dos alas el ala Junior en donde estaban los menores a quince años y el ala Senior donde practican los mayores a quince años, así mismo dentro de cada ala o categoría había una división, el grupo nacional formado por patinadores natos de Japón y el grupo extranjero formado por patinadores de todas partes del mundo; para cada grupo de cada ala hay entrenadores designados, yo voy a estar en la sección de extranjeros en donde hay cuatro entrenadores quienes se hacen cargo de determinados patinadores y sus competencias durante todo el año, a mí ya me habían enseñado una foto de quien sería mi entrenador, un señor de treinta años llamado Natsuru Fujioka, originario de Japón y antiguo patinador.

También me explicaron que uno de los requisitos para entrar a Stigma era saber manejar lo básico del idioma japonés, inglés y para mi gran sorpresa español. No me dijeron el por qué, solo que no me preocupara porque podría comunicarme con todos. Me sentí más tranquila ya que mi japonés es un poco lento. Así al ir conociendo más sobre Stigma más me asombraba de todo lo que implicaba, ahora estamos dirigiéndonos hacia donde me voy a hospedar por toda mi estadía pero al amanecer tengo que ir a presentarme y empezar todo, no podía dejar de pensar en que voy a ser la nueva, días antes de partir Edith había estado molestándome diciendo que tenía que cuidarme de que no me hagan bullying que eso era algo muy común en Japón pero la verdad creo que su información está basada en animes y series raras, no creo que el trato vaya a ser igual que en la ficción. Aun así estoy nerviosa pero ya no tengo fuerzas para pensar en eso, quiero tomar una ducha caliente y dormir.

Llegamos srta. Mila.

S-sí. Gracias.

Los dormitorios de los chicos están en el bloque 2 y el de las chicas es éste el 1. Su compañera de habitación se llama Yoon Yi Seo representante de Corea.

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