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Se comenzaba a marcar una nueva rutina

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Se comenzaba a marcar una nueva rutina. En las mañanas salía de su hogar rumbo a la escuela, pasaba ocho horas largas antes de poder llegar a Kryos, Kai y Cameron lo acompañaban para dos cosas, ayudarle a formar un grupo de investigadores y pasar tiempo con Arleth.

Aunque los chicos dijeron querer aportar en el estudio, lo cierto era que parecían más interesados en ser compañía de Leth y explorar las instalaciones, lo cual no era malo, a Trevor en realidad le agradaba más esa idea pues le dejaba más tranquilo sabiendo que su amiga no se llegaría a sentirse sola. Kai sobre todo se esmeraba en seguir creando apuntes para la chica y estudiar con ella. Pues cuando se enteró que la mujercita estaría ausente del instituto por unos quince días, no dudo en hacer lo posible para que no le costara seguir el ritmo en su regreso. Por otro lado, el moreno alto en ocasiones se escabullía de los deberes escolares para acompañar a Trevor quien junto con Samuel, Joel y Víctor comenzaban el reclutamiento para la formación del grupo que el jovencito pidió. Fue de esa manera que terminó la primera semana hábil de Arleth en Kryos.

En cuanto llego el fin de semana, Trevor fue el único en hacer compañía a la niña, como en ocasiones anteriores veía alguna serie o película, también Arleth le contaba cosas curiosas que Trevor no sabía de su madre, algunas cuantas travesuras. Era divertido saber anécdotas y más cuando su madre parecía ser la líder en pillería.

Trevor sentía lejano aquel lunes cuando despertaron a Leth, sin embargo, apenas había pasado ocho días.

Para ese martes seguía en la escuela, escuchando la clase del profesor Rosello. Literatura nunca sería de su agrado, tampoco aborrecía la materia pero no podía evitar sentirla pesada y aburrida. Demasiada prosa para su gusto. El jovencito bostezó encogiéndose en su butaca.

—    ¿Alguna duda? — Adam dejó el libro sobre su escritorio para dirigirse a sus estudiantes, el brazo estirado de una sobresalió luego de un largo silencio.

—    ¿Sabe por qué no ha venido Arleth? — Trevor se enderezó mirando a la mocosa. Ella ni siquiera hablaba con Leth ¿Por qué diablos preguntaba?

—    Sobre la clase. — Respondió el profesor con un tono severo.

—    Es sobre la clase, Arleth es nuestra compañera. — Y unos cuantos más le hicieron segunda a la chica.

—    Mejor díganos la verdad, ¿Es cierto que estaba embarazada? — Trevor no fue el único en enojarse, Kai y Alelí tenían una mirada recelosa puesta en el chico que habló.

—    Por favor, jóvenes.

—    ¡Dicen que abortó! — La declaración de otro compañero provocó una risa escandalosa por un grupo específico.

Aquel grupito parecía el único en encontrar divertido hablar sobre una de sus compañeras, provocando que el salón pronto se inundará de su escándalo, declaraciones al aire que aseguraban que la muchacha estaba en algún hospital de mala muerte recuperándose, que no tenía el dinero para uno mejor y que su sugar daddy la había abandonado tan pronto se destapó su romance.

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