Capítulo 3

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Me reí esperando que dijera que es una broma y el juego terminara.

-Yo soy Mía, y soy su profesora titular y él es Archie mi mano derecha y confió mucho en él, así que si él dice que 2+2=5 deben de creerle.

Reí sarcásticamente a sus palabras. Lo que más odiada en la vida es que me obliguen a obedecer órdenes y más si son de alguien que no es importante. Enserio creía que yo caería en este estúpido engaño. Levanté la mano y dije.

-¿Ahora es cuándo me puedo reír y decir que esto no fue para nada una buena broma?

Me carcajeé ante mi broma y todos giraron hacia mi dirección y Archie vio a la chica que aparentemente era la Doctora Carter. Ella caminó hacia mi dirección mientras todos le hacían el camino más fácil, y cuando llegó a mí me di cuenta que era lo bastante más pequeña y delicada comparada conmigo. Me miró fijamente y sonrió.

-Sinceramente yo no veo cuál fue la broma o a qué te refieres chico, que parece ser un grandísimo problema. ¿Podrías explicarme el motivo de tus palabras?-levantó una de sus cejas cruzando sus brazos en el pecho.

-¿Crees que me intimidas? -la miré hacia abajo para que nuestros ojos se encontraran-. Bueno, yo no caigo en este tipo de novatadas, así que no aparentes ser quién no eres bonita, que por lo que observo eres muy linda.

La tomé entre mis brazos escuchándose murmuros de toda la clase.

-Y yo puedo observar que no te interesan los problemas o simplemente eres un grandísimo patán, así que castaño engreído ¡Suéltame! O estarás en un grande problema-me respondió enojada observándome con una mirada volcánica.

-Mira castaña a mí nadie me dice qué hacer y si quiero tomo lo que quiero siempre.

Besé sus labios y ella me apartó muy rápido. Archie se acercó y la retiró de mis brazos. Ella me miró y soltó un fuerte golpe en mi mejilla.

-¡Basta! Eres un problema. Así que esta castaña a la que llamas impostora te dice que te vas directo a la dirección y estás expulsado de mi clase, y para que te quede claro que soy la Doctora Mía M. Carter ve mi credencial de profesora y esa sonrisa engreída desaparecerá de tu linda cara de ángel diabólico-respondió molesta y se giró para quedar enfrente a su asistente-. Archie por favor dame mi credencial, está en mi bolsa.

-Pero Mía...-respondió asustado.

-Obedece Archie.

Archie caminó hacia la bolsa y tomó lo que la castaña le había pedido, al parecer sí era una credencial. Cuando por fin lo tuvo entre sus manos y me lanzó el pequeño plástico a mis manos y me di cuenta que estaba en verdaderos problemas.

¿Y qué creen? Sí era la credencial que la acreditaba como la profesora titular. ¡Por Dios estoy en un grandísimo problema con esta profesora! Que horrible forma de comenzar el ciclo escolar.

-¿Ahora sí me crees niño mimado y engreído? ¿Eres tan pretencioso siempre? Y sabes eres tan irritante...

-Doctora Carter debería cálmese, recuerde sus principios morales-la interrumpió Archie tomando de su hombro y la masajeó. Ella suspiró y miró hacia el techo asintiendo con leves movimientos de cabeza de arriba hacia abajo.

-Tienes razón Archie, esta conversación no vale la pena-respondió más tranquila después de inspirar aire por un leve momento. Creo que lleva técnicas de meditación por la forma en que hacia pequeños movimientos con sus manos.

-Chico creo que deberías de irte, después arreglarán las cosas.

Él me señaló la puerta y yo no sabía qué hacer estaba tan apenado que no pude verla de nuevo a los ojos. Sólo salieron de mis labios unas palabras casi imperceptibles.

I love you... ¿Teacher?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora