𝘽𝙍𝙊𝙆𝙀𝙉 ▷ ᴅᴀʀʏʟ ᴅɪxᴏɴ; ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ

↳ 23 |precisely because i care i won't help you

〘 23. PRECISAMENTE PORQUE ME IMPORTA NO TE AYUDARÉ 〙
༆

UNA VUELTA, otra, y otra más... Daryl caminaba de un lado y para el otro, aburrido. No se aguantaba más la espera, era insoportable. Asher se había contentado con observarle: ir de un lado hacia el otro... todo el tiempo. Él también estaba aburrido.

—No hay razón para no emplear el tiempo que estemos juntos en... hablar de nuestros asuntos —Milton rompió de cuajo el silencio tan perturbador que se había creado.

—El jefe nos dijo que no lo hiciéramos...

Si es que era no imposible burlarse de aquello. Dixon no pudo callarse por demasiado tiempo cuando lo soltó.

—¿Quién? ¿El Gobernador? —tan irónico como de costumbre. El desconocido no pareció tomárselo bien, pero aún así, se calmó y no dijo nada.

—Está bien que se hayan reunido después de lo que pasó. Seguro que lo arreglan, nadie quiere otra batalla.

—Yo no lo llamaría batalla —contradijo Daryl.

—Yo sí lo llamaría así —siguió Milton.

—¿Ah, sí? —cuestionó As, sarcástico —. Estupendo, consejero. Un nombre muy acertado.

—Sí —asintió de acorde Milton, enseñando su cuaderno, pasando por alto la burla —, y eso he hecho. He escrito sobre ella.

—¿Para qué? —cuestionó Daryl.

—Para dejar constancia de lo que hemos vivido. Esa será nuestra historia.

—Tiene sentido —admitió Hershel, mostrándose más comprensivo que sus compañeros.

—He hecho docenas de entrevistas y...

Gruñidos interrumpieron a Milton. As se bajó del capó del coche en el que se encontraba sentado.

—Por fin —susurró, adelantándose junto con Daryl. Andrea se fue por el otro lado sola; Asher, Daryl y el hombre fueron hacia delante. Encontraron como tres caminantes y aún viniendo más. Al primero se lo cargó As, desenfundando su hacha. Los otros dos... En fin, Daryl los tenía en la mira, pero entonces le hizo una seña al hombre, que había cogido del coche antes de ir incluso un bate.

—Tú primero —dijo con ironía.

—Ni hablar, primero tú.

Asher rodó los ojos. Si así eran los mayores, nunca quería crecer. Él se cargó a los dos restantes; se sacudió las manos y volvió con Hershel.

—Menudo par de cabezotas... —susurró. As sabía que vendrían más, pero que se las arreglarán ellos; tendrían que hacerlo. Daryl soltó una carcajada al verle y le lanzó una mirada orgullosa. Al menos, le había enseñado bien en esos meses de invierno.

—Marica —no tardó en decirle el hombre al ver a un zombi acercarse. Lo golpeó con suma facilidad bajo los expectantes ojos de Dixon. Él le miró con gracia cuando vio a otros dos acercarse por detrás: lanzó una flecha al primero, que se desplomó en el suelo, y el segundo siguió el pie con la flecha en el cuello; cuando el hombre lo iba a acabar, Daryl sacó su cuchillo y lo lanzó a la perfección, adelantándose. El caminante cayó y el desconocido quedó sin ningún arañazo.