La hija de Hades

Capítulo I

El Olimpo, ciudad de Dioses y de grandes héroes que salvaron en muchas ocasiones la tierra… Ejemplo de ello, Hércules, hijo de Zeus, también Perseo... pero ¿y Hades? Él se supone que es un Dios, vale... del inframundo pero sigue siendo un Dios, ¿por qué no puede estar en el Olimpo junto a sus hermanos Zeus y Poseidón?

Os diré porqué, porque todos piensan que es malvado, que él es la viva imagen de la maldad y que todo lo que quiere es hacer daño a los humanos llevándolos a la perdición, a la avaricia, a la codicia… dicen que Hades es el padre de esos sentimientos inmundos que los humanos poseen pero no es así.

Hades será el Dios del inframundo pero eso no implica que sea malvado, él también ama y siente dolor. No es como todos lo pintan. Él es mi padre y no permitiré que nadie hable mal de él en mi presencia.

Pero por ahora os contaré que es lo que pasa aquí, rebobinemos un poco… los Dioses tienen descendencia pero al igual que los Dioses también los semidioses y aquellos seres que viven en el inframundo, bueno pues como iba diciendo tienen hijos y esos hijos se preparan ni más ni menos que en la Academia Olimpix para convertirse en los próximos dioses.

Al igual que los hijos del Olimpo tienen su academia los hijos del tártaro tenemos la nuestra y es la Academia Tartarox, pero porque les dio la regalada gana a algunos Dioses decidieron unir durante unas semanas de prueba las dos academias y los del Tartarox debemos ir a la Olimpix  y como representante debo ir yo ya que mi padre tiene muertos que llamar…. Y no es broma…

Todos los del Tártaro van en el autobús volador escolar que es negro, casi todos mejor dicho ya que yo voy en el carruaje que mi padre me dejo a mi disposición, ya puedo ver la tortura de Academia que nos espera durante tres semanas, casi un mes…. Agg solo de pensarlo se me pone la piel de gallina y me entran náuseas…

Puedo ver a la entrada un gran barullo de gente con muy pocas ganas de recibirnos, aterrizamos y empiezan a salir del autobús pero yo permanezco en el carruaje esperando que sea una broma y nos tengamos que ir pero no sucederá… bueno dicen que es bonito soñar.

Mi sirviente que es puro huesos descarga mi equipaje y me abre la puerta dejando un camino para que salga y me presenta.

-La representante de la Academia Tartarox, la hija de Hades mi señor… la señorita Gaya Walker- me presenta mi sirviente huesudo dejando que todos admiren mi persona, no soy egocéntrica pero debo decir que ni la hija de afrodita tiene tanta belleza para opacar la mía…

Tengo ojos amarillos ámbar, cabello negro, piel blanca, estatura normal, uñas largas y preciosas, y cuerpo escultural…

-Gaya…. ¿Qué haremos?- me susurra Sadume hija de Medusa

-Tranquila, solos serán unas semanas, el tiempo corre- digo en un susurro para ella provocando que ría y vuelva con el grupo.

Silencio por parte de la dichosa bienvenida, nadie se mueve como si les hubieran petrificado y decido sacar a la luz mi sarcástico humor.

-Sadume, ¿les convertiste en piedra o que? Porque no se mueven- digo y mi grupo se empiezan a reír, entonces un rayo cae asustando a varios de los presentes menos a mi y de la nada aparece el “Gran Zeus”

-Saludos- dice sonriente- yo soy Zeus, pa….

-Si, si, el gran Zeus, padre de todos los dioses y soberano en el Olimpo además de director de esta Academia… lo sabemos- digo mirando mis uñas

-Veo que tu eres Gaya la hija de Hades… mi sobrina- dice y eso provoca que emita un crujido con mis uñas

-Y qué… ¿quieres que te diga tío? Hola queridísimo tío Zeusin, ¿que tal has estado?- digo sarcástica y antes de que diga nada lo vuelvo a interrumpir- No lo preguntaba en serio si pensabas responder