No le mires a los ojos | Luke Hemmings

Capitulo 9. Reacciones.

Un cuadro se cae solo.

Es lo único que pasa tras contar mi sueño a los chicos y a mi padre, los cuales se han quedado mudos.

Curiosamente es un cuadro de una foto que nos tomamos el invierno pasado en la pista de hielo todos juntos. Luke, Ashton, Calum, Michael y yo. Ese día fue increíble, Luke se cayó como unas 500 veces y Michael iba más o menos por la misma cifra.

Eso solo hace que todos nos asustemos más y miremos al lugar en el que se encontraba el cuadro roto en el suelo.

-Habrá sido el viento - dijo mi padre al rato.

Si, el viento, por supuesto. Pues estoy del viento hasta el mismísimo si es él todo el rato. Seguro que el viento también fue el que se llevo a Michael no te jode. Que vamos a morir todos y ya joder, ¿Por qué buscar excusas?

Obviamente eso no lo dije en voz alta porque lo que hace falta ahora es de todo menos meter más miedo.

- - - - -

Cinco días. Cinco días habían pasado desde la desaparición de Michael y cada día veo todo más oscuro. Siento como si cayese constantemente desde un rascacielos pero nunca llegase a impactar en el suelo, viendo como se que se acerca el final pero sigue sin llegar.

Solo pido que esta mierda acabe.

Estos días no estoy yendo al instituto porque sinceramente no tengo fuerzas ni para pestañear. Nunca pensé que me afectaría esto tanto. Sabía que sería muy duro pero no me esperaba acabar así.

Además si fuera poco, en estos días tampoco he dormido nada, absolutamente nada. Y no porque me comiese la cabeza pensando que le habría pasado a Michael o si seguía con vida, que en parte también, si no porque durante estos días siento como que alguien me estuviera observando continuamente. Incluso ahora.

Y aquí estoy, mirando a la nada con el libro de Bajo La Misma Estrella en mi regazo y pensando en todos los momentos que viví con Michael, como cuando le fue a pegar junto con los demás al primer chico que me rompió el corazón, o cuando le teñí el pelo de rubio platino y casi lo dejo ciego porque le cayó tinte en un ojo, cuando un día nos dio por creernos cocineros y nos pusimos los dos a hacer una "tarta" y sí, entre comillas porque lo que salió no se le podía considerar ni comestible o momentos de cuando éramos pequeños y nos poníamos todos a escarbar como locos en el jardín de la tía de Calum pensando que en él había un tesoro... La lista es interminable.

Dejé de recordar momentos junto a Michael cuando sentí que de repente alguien me abrazaba por atrás. Luke. Estos días no para de venir constantemente para ver como estaba. Calum y Ashton también pero Luke muchísimo más. Pasa más tiempo conmigo estos últimos días que en su casa.

- Hola boba. - dijo para después besar mi mejilla.

¿Es normal qué me ponga nerviosa con un simple beso que me dé? No lo sé, pero conseguirlo lo consigue.

La verdad es que es increíble la entereza con la que se está tomando esto. Sé que está fatal o peor que los chicos. Lo conozco como si lo hubiera parido y me imagino que se sentirá culpable porque al no dejarme ir, evitó que Michael apareciese aunque no quería que me fuese. Y también seguro que pensó que fue un cagado por no haber ido a buscarlo él mismo. Pero lo que no se da cuenta es que si me hubiese dejado a mi o se hubiese ido él todo hubiese empeorado.

- Hola capullo. - le respondí.

- ¿Qué lees? - dijo mientras acercaba su rostro al mío para poder leer algún párrafo del libro

- Bueno leer, lo que se dice leer no estaba leyendo... - dije mientras poco a poco bajaba más y más la voz.

Estábamos cerca, muy cerca. Me quedé observándole, observando cómo sus ojos azules iban de izquierda a derecha leyendo el libro, como movía la boca a la par que leía en voz baja.

Se dio cuenta de que lo observaba y este giro su cabeza hacia mi dirección. Sus ojos pasaron de mirarme a los ojos a mirarme los labios, al igual que hice yo. Poco a poco nos íbamos acercando, yo no quería parar y él por lo visto tampoco. Hasta que por fin nuestros labios pudieron tener contacto entre ellos. Era un beso dulce y lento. Era impresionante que lo único que me ha hecho desconectar de toda esta situación hayan sido sus labios.