Sextillizos

Capitulo 3: Primer Día de Clases

Nota del Autor:

¿Quieren saber algo? Esta historia se ha convertido en la más popular de todas las que he escrito, algo que me llena de orgullo y por supuesto felicidad. Es gratificante que a ustedes les guste lo que escribo, así que, como siempre, gracias a todos.

En cualquier caso, acá les traigo el tercer capítulo de Sixtuplets. Como mencionaré al final, me divertí mucho escribiendo esto. Puesto que incluí varias escenas que había venido pensando desde incluso antes de terminar de mirar Gotoubun no Hanayome. Eh, así soy yo, siempre que me gusta un anime/manga empiezo a pensar en la posibilidad de hacer un crossover con Naruto y en las distintas situaciones en las que podría meterse él con los demás.

Dicho esto, también estaba pensando en un futuro hacer una historia con otra serie que miré hace poco: Seishun Buta Yarou wa Bunny Girl Senpai no Yume wo Minai, una serie que contiene un género que no acostumbro a ver en anime pero que aún así me gustó. Sería un harem, pero eh, todavía no; por alguna razón siempre encuentro motivación para seguir esta historia, algo bueno en mi opinión.

Disclaimer: Ni Naruto ni Gotoubun no Hanayome me pertenecen, así como tampoco sus respectivos personajes ni las tramas de estas series. Todo lo mencionado es propiedad de sus autores, creadores.

Capítulo Tres : Primer Día de Clases

"Ne, Naru-kun, ¿me ayudas?"

Ichika Nakano esbozó una sonrisa casi imperceptible mientras asomaba la cabeza por detrás de la cortina del sitio que le habían dado para cambiarse, ojeando a un Naruto que hasta ese momento había estado de brazos cruzados mirando con aire curioso todo lo que le rodeaba. Sus ojos azul zafiro pronto se movieron hasta encontrar los púrpuras de su hermana antes de que su cabeza registrara la pregunta anterior y pestañease. "Eh, ¿qué necesitas Ichika-chan?"

"Necesito ayuda con el cierre de mi vestido", dijo la hermosa joven tan simple y sinceramente como pudo, para así evitar que el chico se pusiese nervioso y se negara a asistirla por vergüenza. "No puedo abrirlo."

"¿Y-Yo?", Naruto apuntó un dedo a su cara, obviamente sorprendido. El ver cómo el pelirrojo miraba para todos lados a continuación, seguramente pensando en buscar a alguien más de entre la gente que iba y venía en el estudio para ayudar a su hermana hizo que los labios de Ichika se curvaran en un pequeño puchero.

Ella no quería a alguien más, ¡ella quería a su niichan! Él no se aprovecharía de ella ni intentaría hacer algo mientras estuviese indefensa, algo que la hacía sentir a salvo y más tranquila... aunque por dentro Ichika quisiese que Naruto ignorase aquello último y utilizase la situación a su favor.

"Sí, tú. No confío en nadie más para esto, o-nii-chan~"

Sus últimas palabras parecieron tener el efecto deseado en el Nakano quien no pudo evitar ruborizarse antes de dirigirse hacia el pequeño probador que había apartado de las cámaras y los demás trabajadores, incluido Kimitsu. Ichika dio un paso atrás para permitirle al chico poder entrar en el sitio, casi parándose contra el espejo detrás suyo.

"V-Voy a entrar, Ichika-chan", fue la única advertencia que lanzó el pelirrojo antes de descorrer las cortinas y asomar la cabeza, congelándose a medio camino. El aliento del chico pareció quedar atrapado en su garganta en cuanto sus orbes se encontraron con la nueva apariencia de su hermana, ahora vestida en un conjunto que resaltaba sus pronunciadas curvas a la perfección, haciendo ver sus atributos aún más amplios de lo que en realidad eran.

La mirada de Naruto recorrió con inconsciente atención la figura de la pelirosa, quien aún si el notar cómo su amado hermano la miraba con... deseo la llenó de una gran emoción y felicidad. Ichika no pudo evitar sentirse algo nerviosa, y expectante. Más allá de la gente que aún esperaba por ella para continuar con la sesión de fotografía, ambos estaban solos, con una mera cortina dándoles una valiosa privacidad.