◾Electric Heart◾Jongkey

~Parte Dos~

Ha pasado una semana llena de sentimientos, luego de lograr la vida de Kibum pasamos la noche simplemente mirándonos y dándonos suaves toques, ni siquiera dormimos, sólo disfrutamos de la compañía del otro, claro tuve que explicarle todo lo que pasó, y él confirmó mis sospechas, había corrido protegiendo el anillo en su suave mano hasta que su corazón no dio más.

Y sólo así pasamos unos días, siendo sólo nosotros. Todo parecía volver a ser perfecto otra vez.

Pero lo inevitable pasó, la gente se enteró, Taemin voló desde Seúl para verte, obligando a Minho en el proceso, cuando les contamos todo naturalmente no nos creyeron, y logramos convencerlos después de unas cuantas pruebas, sus reacciones fueron de todo tipo, incrédulos, asustados, curiosos, asombrados y finalmente felices, lo peor vino después.

Cuando la gente incorrecta se enteró del misterioso caso del joven declarado muerto y que apareció vivo. Vinieron a nuestra casa y nos llevaron a ambos, jamás lograré sacar los gritos de Taemin al darse cuenta que nos llevaban a quizás donde, ni sabíamos por cuanto tiempo y sin comunicación alguna. Escuchar a Taemin y Kibum gritando, ambos asustados, era revivir el dolor de perder a Kibum, no podía hacer nada para evitar lo que estaba pasando, y también estaba asustado, ¿y si me separaban de Kibum? ¿Y si ocupan a Kibum en experimentos extraños u otras cosas?

La gente que pasaba nos miraba asustados, mientras nos metían en la camioneta, pero yo sólo escuchaba los gritos del lugar, cuando cerraron la puerta escuché el llanto de Kibum, y me di cuenta que yo también lloraba, ¿qué pasaba? ¿Qué es esto? Si preguntábamos sólo nos respondían "todas sus dudas serán resueltas más tarde", ¿qué tipo de estúpida respuesta es esa?

El camino fue simplemente borroso, nos obligaron a dormir con una droga y no recuerdo nada, y por más que trato nada viene a mi.

-Me pregunto si Taemin nos busca - susurró Kibum apoyado en mi hombro, en la fría celda en la que estábamos.

-Ni siquiera sabe donde estamos, amor - susurré yo también para no romper el lúgubre ambiente en el que estábamos.

-Desperté antes que tu - sacó su teléfono de bajo su camiseta - lo escondí, envíe nuestra ubicación cuando desperté y un par de mensajes a Taemin, le dije que si era muy arriesgado ya nos arreglaríamos nosotros, pero creo que no hará caso - una pequeña risita se nos escapó a ambos, luego tiró el teléfono y tomó mi mano y la apretó. También tengo miedo, Bummie.

Nos quedamos en ese húmedo, frío, e incómodo lugar por lo que parecieron horas, hasta que llegaron tres hombres armados y nos llevaron a otro lugar, subimos dos pisos, Kibum y yo no nos separamos en ningún momento. Llegamos a una puerta blanca, apenas nos acercamos alguien más la abrió, dejando ver a un hombre alto y de traje, fumando un cigarrillo.

-Kim Jonghyun y Kim Kibum - su voz profunda pegaba muy bien con su aspecto - soy Choi Seunghyun, es realmente un gus...

-Evita las formalidades, idiota - la voz de Kibum se elevó sorprendiéndonos a todos - ¿qué quieres de nosotros? No creo que nos secuestraras para sólo saludar.

-Secuestrar suena muy feo Kibum - soltó el humo y apagó lo que quedaba de su cigarrillo - digamos que los invité, pero tienes razón en algo, si quiero algo de ustedes - se acercó con paso lento, elegante, hasta quedar frente a mi, mirándome directamente a los ojos - ¿cómo es que Kibum esta vivo, Jonghyun? - un escalofrío me recorrió completo al ver su sonrisa - necesito que traigas a la vida a alguien para mi, es importante que.. - nos miró como si hubiéramos recién llegado - Pero que mal educado soy, tomen asiento, rápido, rápido - mientras él hablaba sus secuaces nos empujaban hasta que caímos en un cómodo sofá - ahora, esta persona es muy importante porque es un hacker con información que necesito para mis cosas, y casualmente murió, al igual que Kibum aquí presente, de un problema cardíaco - hacía gestos mientras hablaba y caminaba de un lado a otro - seré directo, Jonghyun, si no lo haces mataré a Kibum.. Y no creo que quieras perderlo otra vez, pasar por ese dolor otra vez - su sonrisa no dio miedo ahora, porque el sólo pensamiento de perder a Kibum me dan ganas de morir.