CAPÍTULO 10 (2/3)

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Título: "flicker" by Niall Horan

-"hay una luz en la oscuridad"

p.o.v.NaYeon

Me miré por última en el espejo de cuerpo entero de mi habitación al lado de mi cama. Llevaba una camiseta roja ajustada al cuerpo y una falda de vuelo negra que me llegaba a mitad de los muslos. Me calcé unas botas negras de terciopelo que me llegaban hasta encima de la rodilla y me miré el pelo marrón ondulado en el espejo.

Me di una pequeña sonrisa y cogí las llaves de mi casa del escritorio. No sabía porque estaba tan emocionada, pero lo estaba. Sentía que una sonrisa constante estaba dibujada en mis labios desde que SooBin y yo empezamos a vernos con más frecuencia o a hablar más seguido. Me gustaba lo espontaneo que era a veces, diciendo todas aquellas ideas descabelladas que se le pasaban por la cabeza. Y me encantaba que no fuera como todos los chicos con los que había estado. Porque era dulce, tímido y atento. Y eso me hacía quererme quedar siempre un rato más mientras me hablaba de sus clases y sus entrenamientos con los informáticos de la mafia o uno de los videos de había visto de repostería. Me encantaba que fuera tan él, que nada ni nadie le influyeran en su misión de ser él mismo y mostrarse al mundo tal y como era, incluso con sus inseguridades.

-Hola – me dijo Chan con una sonrisa sarcástica cuando piqué en la puerta – ¿vienes a por tu novio no?

-No es mi novio – le dije empujándolo para que se apartara de la puerta y me dejara pasar.

-No es mi novio – dijo imitando mi voz, y yo mi giré fulminándolo con la mirada - ¿Qué? Eres tu la que me ha llamado esta mañana preguntándome que cual era el restaurante favorito de mi hermano para llevártelo allí – me dijo y yo me senté en el sofá.

Chan lo hizo a mi lado aún con la sonrisa esa como si supiera lo que se me estaba pasando por la cabeza. Yo le puse la mano a Chan en la cara para apartársela.

-¿Está? – le pregunté. Y él me negó diciendo que se había ido a casa de HyunJin hacía dos horas.

-Se está poniendo guapo para la cita – dijo él riendo y yo me crucé de brazos sobre mi pecho y miré al frente. Aunque muy en el fondo me hacía ilusión que para él también fuera importante – a mí no me mires así. Me voy a reír lo que me de la gana, que para algo es mi hermano y tú mi mejor amiga.

Yo rodé los ojos y le envié un mensaje a SooBin diciéndole que ya estaba en su casa. Y él me respondió al minuto diciéndome que estaba de camino a su casa.

Mi tía Jennie se nos unió a Chan y a mí, y yo estuve hablando un poco con ella. No sabía que pasaba entre Chan y su madre, porque no era normal como la trataba él a ella ahora.

Para Chan su madre era uno de los mayores pilares de su vida, y viceversa, eran inseparables. Y no entendía porque últimamente estaba tan frío con ella. Lo único que sabía era lo que mi hermana me había contado. SooBin le había dicho a ChaerYeong que sus padres estaban peleados, porque una vez que vino a casa los escuchó discutir. Pero si no hubiera sido por eso lo más seguro es que nadie supiera nada. Y eso era así, nadie sabía que pasaba, aunque todos viéramos cosas. 

-Ya estoy – dijo SooBin y cuando lo vimos entrar por la puerta llevaba un pequeño cachorro entre sus brazos – parece que tiene la pata rota y estaba abandonado en la calle. Mira – dijo alzándole un poco la cabeza al labrador marrón – no tiene collar – dijo él mirándonos a los tres - ¿podemos quedárnoslo, mamá? – dijo con un puchero que me pareció adorable.

-Si, pero tu te haces responsable – dijo ella.

Y SooBin sonrió grande y ancho. Alzando al perro entre sus brazos.

UTOPIA; 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora