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Un jodido abrazo (Jordi x Auron)

Pareja: Auronplay x Jordi Wild (El rincón de Giorgio)
Advertencias: contenido homosexual con posible contenido sexual. Última historia con Auron, pobrecito, es que inspira un montón para involucrarlo con todo mundo porque es bien calzón flojo.
Palabras: 2295

★★★

La noche ya estaba cayendo con su sabia lentitud, justo cuando ya habían terminado de grabar sus respectivos videos de la última vez que tratarían de envenenarse como material de trabajo, así que los amigos se dispusieron a pasar la noche ya que al día siguiente, Auron se iría, cada uno estaría en su hogar y se encargarían de editar lo que ya tenían.

Todo sería tan normal como cualquier visita donde uno se quedaba en casa del otro pero Jordi no lograba sentirse cómodo en su propio departamento y, de cierta manera, era culpa de su visitante.

Mas de una vez, una idea fugaz había atravesado su cabeza, mientras Auron hacía alguna broma o decía una estupidez, incluso cuando sólo se recostaba a su lado para ver una película se había preguntado: ¿Qué se sentiría besarlo?

Aún después de que con sus antiguas novias las cosas no habían resultado como él esperaba, nunca se había desilusionado con respecto a las mujeres, aún así, tenía esta extraña tentación cuando se encontraba solamente con Raúl. Por fortuna, la idea se iba tan rápido como llegaba.

Pero esta vez era diferente...

El dueño del lugar no podía creer que estaba tan alterado y deseoso de tomar a su amigo entre sus brazos, estrujar esa carne que nada se comparaba con sus firmes y trabajados músculos pero era igual de apetecible y tentadora para su acalorada mente.

Jordi estaba tan necesitado de algo, quizá un jodido abrazo del más bajo, pues entre más intentaba hablar de cualquier cosa e ignorar esas sensaciones, más quería pegar al otro contra sí. Parecía como si él fuera el que se tomara la maldita viagra mientras que su amigo estaba tan fresco.

Creía que lo único que necesitaba era un poco de contacto, pero el más alto ignoraba que, entre más tuviera, más desearía hasta que no hubiera diferencia entre lo que había y lo que tenía de Auron. Pronto las circunstancias y sus sensaciones se lo harían ver.

Mientras tanto, observaba el cadáver del calcetín que ahora el otro utilizaba de pulsera y se sintió fastidiado al recordar lo que había hecho con el regalo que le había dado con tanto aprecio, estaba orgulloso de sus logros y el maldito insensible lo hacía pedazos.

—¿Por qué no tiras eso a la basura? —El más bajo puso toda su atención en Jordi, manteniendo la sonrisa.— Ya lo hiciste mierda para que yo lo comiera.

—¡Eh! Que yo no lo he hecho mierda, sólo quería saber si reconocías tu propia mercancía —Le dedicó una odiosa sonrisa burlona que hizo molestar más al exmodelo— Además, no podría tirar a la basura algo que me diste tú.

Se portaba como un idiota pero adoraba cuando decía cosas así y su corazón estaba de acuerdo mientras se aceleraba, recordándole que, en ratos, su cuerpo le daba por cambiar de bando.

En un capricho absurdo por reafirmar su indignación, Jordi lo tomó de la muñeca para jugar con el pedazo de tela que tenía y, a la vez, rozar su piel. Si al otro le molestó, no dió muestra de ello aunque por un segundo, Jordi creyó verlo lamerse los labios para luego recuperar su mano.

—Deja es mío.

—Ya no sirve... Y ni creas que volveré a regalarte nada... —Estaba a punto de quitárselo pero él apretó el agarre sobre la prenda.