Naruto

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Han pasado unos tres años de lo ocurrido, tres años desde que Sasuke decidió abandonar la aldea en busca de poder y de venganza, tres años desde que me fui a entrenar con Ero-senin, tres años sin estar en mi hogar, tres años sin ver mis amigos, tres años cargando el dolor de no poder detener a Sasuke, apesar de todo no pude hacer nada por él, y se suponía que era su mejor amigo.

-¡ Naruto ! - escuché que me llamaban a lo lejos, volteé mi cabeza viendo de quien se trataba, era Sakura corriendo así mí.

- ¡ Sakura ! ¿ Cómo has estado ? - pregunté entusiasmado, después de todo, hace años que no la veía.

- Entrenando para volverme fuerte, ¿ Nada malo te paso en el viaje ?-

- No, y que me cuentas de la aldea -

- Todo normal, los chicos se van a alegra de que volviste - sonrió mientras caminábamos por la aldea, nada a cambiado, en eso encontramos a Hinata, Kiba y Shino, conversamos un rato con ellos para después despedirme de todos y caminar de forma tranquila a casa, después de todo, no es como si me esperarán en casa.

Pero vaya sorpresa me lleve, Iruka-sensei se encontraba esperándome con una sonrisa extendiendo sus brazos esperando que lo abrace, y por su puesto lo hice, sin duda al que más extrañe fue él.

- ¡ Iruka-sensei ! - grite queriendo llorar como un niño que no ve a su padre en años, aunque para mí lo es.

- ¿ Cómo te ha ido Naruto ? ¿ No te hiciste daño ? ¿ O tienes hambre ? Porque traje para comer tu Ramen favorito - pregunto preocupado examinado a su estudiante queriendo asegurarse que no esté herido, ante esa acción y palabras el rubio rompe en llanto, preocupado más al castaño.

- Estoy bien Iruka-sensei, no me pasa nada - dijo limpiándose las lágrimas con una sonrisa en el rostro.

- ¿ Seguro ?-

- Sí, pero tengo hambre - reconoció al escuchar su estómago gruñir.

- Siéntate en la mesa mientras se calienta el Ramen, ahora, cuéntame como te fue el viaje -

- Pues Ero-senin ..... -

Así fue que conversaron por horas acordado reuniese un día solo los dos para recuperar el tiempo perdido, ese día pudo dormir feliz sin pensar en Sasuke, su antiguo maestro le levanto el ánimo.

Mientras en otro lado un azabache miraba a la luna con una mirada entristecida recordando cosas del pasado, tratando de olvidar el crimen que cometió hoy, asesinar a inocentes por orden de Oruchimaru, cosa que no es rara ya que lleva haciéndolo desde hace 2 años, pero hoy se le quedó marcado como asesino a una familia completa dejando solo a un niño como sobreviviente, le recuerdo a él cuando Itachi hizo lo mismo, su dolor, el terror en sus ojos, sus gritos de desesperación para que dejara de asesinar a su familia, y el odio que vio en sus ojos hacia su persona, todo eso le recuerdo a él, porque lo vivió en carne propia, sabe el dolor que debió sufrir el niño, y sentía enojado consigo mismo, se sentía una basura, porque hizo lo mismo que Itachi, y él no quería ser como su hermano, pero si no lo hacía, Oruchimaru no le daría el poder que necesitaba para vengarse, sabía que tendría problemas con el pequeño si buscaba venganza por matar a su familia, y estaría preparado si eso ocurría, aunque el en fondo de su ser decía que lo tenía bien merecido por dejarse llevar por el odio y no quedarse en Konoha.

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¿ Todo bien gente ? ¿ Qué les pareció el capítulo ? Trate de hacerlo lo más emocional pude, porque ya se acerca el final de la historia.

No prometo actualizar rápido, porque me quiero tomar el tiempo de escribir bien los demás capítulos siguientes o editar lo que están.

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