Capítulo 1

132 11 6
                                    


El helado frío de Rusia hacía parecer el ambiente más nostálgico para el pequeño japonés, quien estaba acurrucado en el gran sofá de cuero mientras observaba la nieve caer.

Había hecho ya la cena y ahora aguardaba la llegada de su esposo. Desvío su mirada a su mano donde brillaba su anillo de compromiso y matrimonio. Una pequeña sonrisa melancólica apareció en su rostro y un recuerdo vino a él.

El peliplateado lo observaba esperando una respuesta del nipon, quien de la emoción se había quedado sin palabras. —"Sí Víktor, quiero casarme contigo"—. El ruso tomó con delicadeza la mano de Yuuri y coloco el anillo de compromiso en el dedo anular del menor.
— "Prometo hacerte el hombre más feliz del mundo" — le dijo acercando su rostro y depositando un suave beso lleno de amor.

Aquellas últimas palabras sonaban tan lejanas para Yuuri y se preguntaba porqué todo había cambiado hace poco tiempo. ¿El había hecho algo mal? ¿Porque Víctor lo trataba así? ¿Ya no lo amaba?

No lo entendía ¿Qué había pasado? ¿Acaso sólo era una máscara y ahora le mostraba como era en realidad?

Al comienzo de su matrimonio, todo era felicidad, Yuuri se sentía en el cielo, tenía por esposo a un hombre maravilloso, atento y amoroso. Todo lo que había soñado. Quizá no se dio cuenta hasta ahora de lo celoso y posesivo que era ya que estaba profundamente enamorado.

Ahora que lo recordaba bien, desde que aquel reportero se había acercado a él para hacerle una entrevista, todo cambió definitivamente.

Estaba sentado en una cafetería esperando a que regresara Víktor. Cuando un joven reportero se acercó a él.

—Sr. Katsuki qué sorpresa haberlo encontrado aquí. ¿Me permitiría hacerle unas preguntas? —

Nervioso, Yuuri miró de reojo a la entrada al baño. Sin dejar de ser cortéz respondió.

—Cl-claro, pero por favor que sea rápido.—

El reportero que lo venía siguiendo desde hace un rato junto con el camarografo, no perdería esta oportunidad de sacar un chisme jugoso de los famosos patinadores.

— No se preocupe, seré rápido.— Le hizo una seña a su compañero para que empezara a grabar.

—¡¡Cómo están!! Estamos aquí junto a nada más y nada menos que Yuuri Katsuki, díganos Sr. Katsuki ¿Está aquí solo o en compañía de su esposo?—

—Estoy junto a mi esposo, quien estará aquí pronto.— Respondió Yuuri con una pequeña sonrisa.

—Últimamente, no se le a visto tanto como antes Sr. Katsuki. ¿Acaso su esposo no lo deja salir? ¿Teme que alguien lo conquiste y lo arrebate de su lado? — Añadió con sorna mirando de reojo al camarografo.

—Jajaja pero que cosas dice, no temo que alguien lo conquiste, puede intentarlo si quiere que no lo logrará, puesto que Yuuri solo tiene ojos para mí. ¿No es así, cariño? — Dijo Víktor acercándose con una sonrisa y pasando un brazo sobre los hombros del japonés apegandolo a él.

—S-sí Vitya—

—!!Sr. Nikiforov!! Pero que agradable sorpresa. Le preguntaba al Sr. Katsuki el porqué no se lo ha visto en público más seguido.

—Bueno, Yuuri últimamente a estado un poco delicado de salud. Hoy se a sentido mejor así que hemos salimos a tomar un poco de aire.— Respondió presionando sus dedos con un poco de fuerza sobre el brazo del nipon. El camarografo frunció el seño al notar aquella acción. Casi imperceptible.

Caminos SeparadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora