𝐕 𝐦𝐢 𝐚𝐛𝐮𝐞𝐥𝐚

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"𝑺𝒖𝒔 𝒑𝒂𝒍𝒂𝒃𝒓𝒂𝒔 𝒂𝒖𝒏 𝒎𝒆 𝒅𝒖𝒆𝒍𝒆𝒏 𝒎𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒆𝒍𝒍𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒍𝒂𝒔𝒕𝒊𝒎𝒂𝒓𝒊𝒂𝒏"

Una de las cosas que más recuerdo, es que Castiel siempre me apoyo cada que mi abuela me hacía sentir mal y estoy muy agradecida con el por eso, no puedo imaginar que hubiera pasado sin su apoyo.

Desde que mi padre falleció todo cambio en mi vida, a pesar de que mis padres estaban separados desde hace bastante tiempo eso también afecto a mi madre, todo fue muy repentino, ella me dejó con mi abuela, la cual vivía en otra ciudad, al principio no pensé que sería algo malo pues también estaba mi tía Agatha y es como mi Ada madrina desde que era una niña, ella siempre estaba al pendiente de mí y me trataba muy bien.

Me encantaría decir lo mismo de mi abuela, mi madre y yo no solíamos visitarla mucho cuando era niña ya que estaba bastante retirada la cuidad donde vivíamos, no era muy cercana a mi a como era con mis otros primos, los cuales si vivían ahí, eso tampoco la hacía mala conmigo solo un poco distante.

No me gritaba, no me hacía sentir mal y ni era tan grosera, todo era porque vivía en su techo bajo su reglas y no, no tenía problema con las reglas pero tampoco tenía ella el derecho de gritarme, hacerme sentir inútil desde que llegué a su casa, tampoco aguantar sus comentarios y en verdad me dolía todo lo que me hacía sentir.

Aguante mucho y no le decía a nadie pero un día paso mi límite, estaba ayudando a limpiar la casa y ella se había molestado porque llegué tarde a comparación de la hora a la que normalmente llegaba del colegio, a ella no le gustaba que me fuera a otro lugar después de salir, era una de sus reglas.

De la casa a la escuela y de la escuela a la casa, entendía porque era así de estricta pues mi madre de joven hizo muchas cosas pero yo no le daba motivos para tener desconfianza y en la escuela era una de las mejores alumnas en cuanto a notas y conducta, tampoco iba a fiestas, no invitaba a nadie a casa porque sabía lo pesada que era, siempre pedía permiso para todo y esa vez no dije nada porque yo sabía que no me daría permiso.

Me había ido al centro comercial a comprarle un regalo a mi Tía Agatha pues pronto sería su cumpleaños y había ahorrado para ese regalo, se que me hubiera evitado sus regaños diciendo la verdad pero le diría a mi tía que le había comprado algo y era sorpresa, mi abuela nunca guardaba mis secretos.

Entonces yo estaba dispuesta escuchar sus reclamos e incluso que me llamase cualquiera solo por llegar tarde, como si me hubiese ido acostar con alguien y me daba risa, como podía exagerar algo tan pequeño, sus insultos no eran nada, pues ya me estaba acostumbrando pero como siempre ella encontraba uno que si doliera.

Mencionó a mi padre, yo la ví como un monstruo cuando lo hizo porque sabía cuánto me dolió su muerte y tenía que mencionarlo, sentía que era lo peor que me podían hacer pero era muy inocente eso no era nada a lo que me haría después, ese ser estaba lleno de rencor hacia a mi y antes no lo entendía.

Cuando termine de asimilar sus palabras, deje lo que estaba haciendo y me encerré en mi a cuarto, ya me había sentido así hace un tiempo, no quería ni comer y no salía de la casa por eso mi madre también me había traído a esta cuidad por mi "bien", me llevo a otro hoyo aún más profundo que el otro...

Le quería llamar a mi madre para decirle todo y que no soportaba a mi abuela pero no quería hacerla sentir peor, pensaba que ella tenía más problemas que yo y que era parte de sus problemas, no quería sumarle más.

Me sentía sola, se que tenía a mi Tía Agatha pero no estaba todo el tiempo por su trabajo, no era lo mismo que cuando venía de vacaciones, la realidad es que también tenía muchas cosas que hacer, no solo cuidarme a mi.

Me calme un poco y busque mi celular para poner música, siempre me ayudaba a sentirme mejor o peor, eso me ayudaba a sacar todo.

Tenía un mensaje de Castiel.

"Castiel"
Estás bien?, Hoy casi no hablamos y creo que tienes muchas tareas, no te estreses.

"No sé"
No estoy bien la verdad.
Necesito hablar con alguien, estás ocupado?

Envié el mensaje dudando, no sabía si contarle o no, sentía que no se lo tomaría en serio pero fue todo lo contrario, nadie me escuchaba mejor que el, Castiel desde ese día se había vuelto un pilar para mí y me hacía sentir muy bien.


Si sentían que iban a odiar a Debrah les prometo que este personaje es peor, también quiero decirles que la muerte del padre de Sucrette puede sonar cliché pero es fundamental para la historia, después les contare como pasó y todo.

𝑺𝒐𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒆𝒓𝒕𝒆 ᶜᵃˢᵗⁱᵉˡ ʸ ˢᵘᶜʳᵉᵗᵗᵉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora