La curiosidad mato a Dazai

Parte única

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― Puedo hacerte una mejor propuesta que tomar vodka, ¿Quieres oirla?.

–Oh, claro... ¿Cuál es esa propuesta?.

―  Si te hago sentir bien ahí abajo, haré lo que me pidas por tres días enteros ~ incluso si es algo no apto para niño.

–Dazai... ¿Tanta curiosidad tienes de saber cómo la tengo?.

― ¿Tiene algo de malo? Somos adultos después de todo.

–Me parece extraño viniendo de ti...~

― Un poco, pero soy humano, tengo mis días.

–Bueno, si quieres compruébalo tú mismo, a mí no me molesta.

― Oh, hoy estás generoso ― solo pudo sonreír pícaramente ante la respuesta positiva pero no perdió oportunidad al acercarse y agacharse a laltura de la pelvis, desabrochó el pantalón ajeno con tranquilidad, rebuscando entre la ropa interior de este dicho miembro.

― Ah ~ No está mal, no está mal, se ve bastante bien ― realmente pensaba que tenía algo bueno con que jugar,  su boca no se hizo esperar ni sus manos tampoco, le tomó suavemente y le dio una lamida, como si quisiera probarlo, solo de ahí partió a poner su mano en la base permitiendole meterlo dentro de su boca, solo se dedicó a chupar desde ahí, sin perder de la vista cierta silueta ―.

Fyodor miraba como este comenzó a desabrochar su pantalón, en cuestión de segundos vio como tenía su miembro al descubierto, era increíble la agilidad que tenía en las manos el suicida, sonrió un poco y llevó una mano a su cabello para sujetarlo de este. El joven ruso tenía la respiración levemente agitada, movía un poco sus caderas disfrutando de la sensación húmeda de la boca del suicida, su miraba profunda estaba clavada en el contrario.

– Al final iba a ser verdad que me ibas a hacer sentir~.–Dijo este con un tono de voz algo agitado y una sonrisa pícara.

La sensación calida de su boca rozando las carnes del ajeno le era plenamente excitante y ver como este le seguía el juego provocó que las mejillas de Dazai  se colorearan de un rojo intenso, de alguna manera se veía realmente atractivo de esa manera hasta el escucharle le ponía ciertamente caliente.

― Soy hombre de palabra ¿Lo olvidas? ― contestó cuando paró temporalmente su boca del trabajo, trabajo que volvió a hacer sin problemas, aunque ya le era un poco difícil mantener arrodillado con el problema que tenía entre las piernas, estaba perdido en la calentura del momento, chupaba, lamia y a veces hasta estiraba levemente el cuero del pene ajeno.

― Está tan duro..... ― susurró al notar que se sentía un poco más grande y duro cuando se atrevió a empezar a jugar con sus testiculos, sonrió.

―  Si terminas en mi boca, no habrá problema ~.

–Entonces perfecto, aunque me hubieras dicho que no, lo hubiera hecho igual.~ —repondio Fyodor.

Cada lamida era una sensación indescriptible, al igual en la forma que chupaba cada sitio de su falo. Sin duda su palabra no fallaba, Fyodor solamente sonreía del placer, claramente era algo a lo que no se podía negar. Su cadera se movía a ritmo lento de momento, dándole algo de tiempo al suicida para divertirse, se estremeció levemente al sentir como jugaba con sus testículos, esa pequeña jugada no se la esperó. Luego de unos minutos, tomó su cabeza y comenzó a mover sus caderas de forma constante, sacaba y metía su pene de la boca del contrario mientras se notaba como cada vez se endurecía más y más su miembro.

–Que boca tan húmeda y cálida, Dazai~ Uff~

Dazai cerró instintivamente los ojos cuando le tomó de esa manera, casi se había ahogado a la primera de no ser que sus manos se mantenían fijas a los lados de la pelvis del otro, toda esa movida lo estaba volviendo un manojo de sensación incluso sin darse cuenta su propio empezaba a humedecerse por un pequeño orgasmo provocado por toda la situación.