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- Papá... ¡Papá!

Yoongi despertó algo agitado creyendo ver por un momento el rostro preocupado de Jimin, sin embargo eso no fue más que producto del sueño al darse cuenta de que quien tenía delante era Chinmae, que le miraba algo preocupado. Algo confundido por tan brusco despertar se rascó los ojos, dándose cuenta de que había tenido otra pesadilla. Ni siquiera recordaba de que se trataba, pero podía estar seguro de las cosas que involucraban. El estrés aquellas semanas le estaba destrozando.

Ya no solo con el hecho de que lo que parecía una prometedora; aunque dolorosa; pista no estaba llevando a nada por muchos días que pasaran, sino que además no podía sino preocuparse de más por Namjoon. Había descubierto algo tarde que este se había visto envuelto en una pelea; no estaba muy seguro; para salvar a Seokjin, resultando en este en el hospital, y posteriormente en una investigación policial para dar con los agresores. Así que no podía contar mucho con su amigo aquellos días, al menos no tanto como antes pues que aún con todo se esforzaba en ir a ayudarle y hacerle compañía, ya que también estaba ocupado cuidando de su pareja, que aparentemente seguía asustado de salir a la calle sólo.

- Lo siento cachorrito... ¿Q... Que ha pasado? ¿Te he despertado? - murmuró terminando de rascarse los ojos con un débil bostezo.

Sabía que su hijo no solía despertarle ni por una pesadilla, en aquellos casos se metía directamente a la cama con él y aquello solía ser suficiente para apaciguar sus sueños. Así que o había sido una pesadilla muy ruidosa o había otro motivo.

- Si. Habías empezado a gritar...

Al ver como Chinmae abrazaba con un poco de fuerza su peluche Chimmy Yoongi dejó escapar un débil suspiro, besándole la frente.

- Lo siento, he debido de asustarte mucho. No volverá a pasar.

- No tienes que pedir perdón papá, las pesadillas a veces son muy malas.

- Si, eso es verdad - murmuró intentando mantener una agotada sonrisa - Las pesadillas son muy malas. ¿Te quedarías a dormir conmigo? Así seguro que no tendría más pesadillas.

Chinmae asintió sin dudarlo, especialmente porque ese era su plan desde el principio, y sin soltar su peluche se tumbó al lado de su padre, acurrucándose y abrazándole. Yoongi por su parte no tardó en abrazarle por igual, besándole la frente una última vez antes de acurrucarse y buscar algo de calidez en su hijo. Sin embargo no pasó mucho rato que empezó a notar un aroma que ya reconocía inundando con suavidad el lugar. Canela, menta y malvaviscos. Dirigió su mirada a Chinmae, viendo que este se había quedado dormido del todo de nuevo sin soltarle ni a él ni a su peluche. En qué momento había inundado la habitación era algo que desconocía puesto que sus feromonas no tenían mucha fuerza debido a la temprana edad. Apartó con suavidad unos mechones de cabello, preguntándose cuando le bajaría su primer celo. Le preocupaba un poco, especialmente si resultaba ser omega, más que nada por que sentía que no tenía ni idea de como cuidar a un omega. En el fondo sabía que no era ni más ni menos difícil, pero tenía un poco implantada esa inseguridad. Aún así, resultase en lo que resultase, se esforzaría igual que lo había hecho siempre. Con ese pensamiento en la cabeza tardó un poco más en dormir, resultando en que al día siguiente tuviera que llevar a Chinmae a la escuela algo más agotado de lo habitual.

- Hyung, tienes una cara horrible...

Sin dejar de vigilar a Chinmae dejándose peinar con una diminuta sonrisa por una demasiado alegre Iseul se había puesto a hablar un poco con Jungkook, entendiendo que no se lo había querido decir antes en el coche delante de los niños cuando fue a recogerles como ya le era usual. Así que sencillamente asintió ante la preocupación ajena. Le extrañaba que desde que había vuelto a empezar la escuela días atrás no hubiera comentado nada, pues estaba seguro de que también tenía una cara horrible. Sus pocos momentos de tranquilidad se podían contar con los dedos, y eran cuando pasaba tiempo con Chinmae o Hoseok, y muy ocasionalmente con Namjoon. Ni siquiera el trabajo en la tienda lograba distraerle del todo.

Flores Para Todos Los Niños - {{ Sope - Omegaverse }}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora