SÁBADO 14 DE MARZO 2020, 00:00 hrs, Parque Municipal.

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Yo no sabía que hacer mi mente estaba en blanco, pasaba el tiempo y yo seguía junto a su cuerpo, sin moverme un centímetro, sin saber que seguía. Y el culpable estaba a mi lado, tenía que hacerlo pagar, quería que sufriera. Creí que la mejor idea era llevarlo a mi casa y tenerlo ahí hasta que se me ocurriera la mejor venganza. Así que eso hice, tomé su cuerpo aun inconsciente y lo metí al maletero. También me lleve a Michelle, a ella la puse en el asiento del copiloto, así sentiría como si aún estuviera conmigo, a mi lado.

El trayecto era corto, unos 20 minutos hasta mi casa, por lo que no hubo contratiempos, en cuestión de minutos estaría en casa, sin embargo, me parecían horas, estaba enojado, nervioso, triste, tenía un cumulo de emociones gigantesco y todos ellos me cegaban por completo, al tal punto que no pensé en que le diría a mi padre al llegar a casa, ni si quiera me paso por la cabeza, al menos hasta que llegue a casa y lo vi esperándome en la puerta.

Al verlo me quede helado, solo estacione el carro y no salí del carro, entonces mi padre se acercó a la ventanilla

─¿Qué pasa hijo? ─pregunto, ─ Por qué te saliste tan tarde de la casa y si avisar?

Yo solo guarde silencio y agache la cabeza, no podía explicar lo que había pasado, y entonces mi papa se asomó aún más dentro del auto

─ ¿Qué hace ella aquí tan tarde? ─volvió a preguntarme ─Y ¿Por qué está dormida?

─Papá, sucedió algo esta noche...

comencé a explicarle todo lo ocurrido, incluido que estaba Erick en el maletero aun inconsciente y, lo más importante, que Michelle estaba muerta...

─ ¿En que estabas pensando?, ¿Por qué los trajiste a ambos aquí? Debiste llamar a la policía ─dijo ahogando el grito claramente enojado y nervioso por la situación.

─No lo sé papá, fue lo único que se me ocurrió, estaba nervioso y...

─ ¡Cállate! ─me interrumpió, ─Sera mejor que los metas al sótano hasta saber qué hacer.

Procedimos a meterlos, primero lo metimos a él, antes de que despertara. Lo bajamos al sótano y lo pusimos en una silla y lo amarramos. Después la metimos a ella, la dejamos recostada en el piso. Al terminar subimos a la sala, el solo me veía nervioso, con una cara pensativa, como si quisiera encontrar una solución rápida, aunque supongo que, al igual que yo, no encontraba ninguna.

─Papá, creo que no va a haber de otra ─dije tímidamente, ─hay que llamar a la policía.

─Tienes razón, es la única salida, pero primero necesitamos lograr que el confiese lo que hizo, si no, los principales sospechosos seremos nosotros por traerlos aquí.

─Está bien, vamos ─dije muy seguro.

─No, tú te quedas aquí, yo voy a hablar con el ─contesto rápido poniéndome la mano en el pecho.

─Pero, papá, ese idiota mato a Michelle, tengo que saber porque lo hizo.

─Que no, yo lo hare solo y cuando te diga llamas a la policía.

Inmediatamente se fue para abajo, con prisa, pero aun nervioso. Yo me quede con la duda de porque no me dejo hablar también con él, así que de todas formas fui tras de él, aunque antes llame a la policía para que llegaran lo antes posible.

De la manera más sigilosa posible me asome por la puerta del sótano, sin embargo, como no se alcanzaba a ver ya que estaba hasta el fondo use la cámara de mi celular para hacer zoom y poder ver lo que decían.

─Despierta estúpido ─dijo mi papá enojado.

─ "JEJEJE" Hola doctor Miranda ─contesto Erick con tono de burla, ─el trabajo está hecho...

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