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"Cuando el príncipe Vlad III obtuvo su venganza, fue enviado con la madre de los demonios: Lilith, una demonio con apariencia angelical, le ofreció un lugar con los demonios mayores, él sería ahora el padre de la nueva raza de los no-muertos: los ...

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"Cuando el príncipe Vlad III obtuvo su venganza, fue enviado con la madre de los demonios: Lilith, una demonio con apariencia angelical, le ofreció un lugar con los demonios mayores, él sería ahora el padre de la nueva raza de los no-muertos: los vampiros."

Lee Taeyong aprendió que lo que no te mata te hace más fuerte de la manera más cruda a sus once años, cuándo una vampira mató a su padre en frente de sus ojos. Su nana tuvo que ver, una vampira la sedujo y cayó en todas sus manipulaciones hasta que la dejó entrar, la mirada de arrepentimiento de su nana Wheein le taladraba el corazón, aquella vampira buscaba venganza, pues su padre había matado a su amada (O eso fue lo que le dijo a su nana). Wheein valientemente trató de matarla con unos aretes de plata; pero fue completamente inútil, el ser nocturno huyó herida, jurando venganza. Para su padre, ya no había esperanza; murió en un charco de sangre que jamás podría olvidar.

A pesar de eso, no le guardaba rencor a nadie. Su tío se encargó personalmente de todo, despidió a Wheein dándole una buena cantidad de dinero y se llevó a Taeyong a vivir a Canadá; lejos de todo aquello que creía que pensaba que al menor le hacía mal, su padre no tuvo un funeral, su cuerpo fue cremado; Taeyong conservaba la urna con las cenizas benditas de su progenitor, se encargaron de hacer un pequeño templo para que el muchacho pudiera rezarle sin ningún problema.

El albino suspiro, cargó su maleta y caminó por el aeropuerto de Incheon; pasaron veinte años desde entonces, era extraño para él volver a Corea. Desde que cumplió la mayoría de edad intentó convencer a su tío que era lo mejor, pero ese viejo era igual de terco que su padre...

Entendía que temiera por su vida, su temor de que esa vampira regresará por él, pero no podía seguir huyendo, Taeyong hizo un esfuerzo enorme para que lo dejara, se encargaría de unos negocios de su tío en su país natal y con el tiempo, planeaba ser independiente y ya no depender de su tío.

Todo el mundo pensaba que él desarrolló una especie de trauma, pero estaban equivocados, su interés por los vampiros solo aumentó a través de los años, en Canadá abundaban muchos, sin embargo, no eran como el vampiro que conoció cuando era un niño. Le causaba mucho interés y muchos quisieron seducirlo, sin tener éxito alguno, ni siquiera para probar su sangre (la cual decían que olía muy bien). No era tonto, siempre cargaba un rosario y las pistolas de su difunto padre por si debía defenderse, no tenía la experiencia de su progenitor, pero lo intentaba.

Mientras caminaba hacia la salida, se preguntaba que jodidos le pasó al señor vampiro, seguramente se enojó al no encontrarlo de su casa y lo llamó varias veces embustero. No pudo evitar hacer una mueca de disgusto de solo pensarlo, Taeyong para nada era un mentiroso; de verdad hubiera querido cumplir con el trato, pero nunca espero que todo acabara así.

—¿Estás bien? —Taeyong se sobresaltó cuando escuchó la voz de su mejor amigo: Jonghyun, por estar sumergido en sus pensamientos, no notó cuando su automóvil se paró en frente de él. —Sube, está haciendo frío.

Your Blood » JaeYong.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora