Sister Issues [MoonSun]

Capítulo 4

Yonghee POV

Me encontraba terminando de revisar los correos en mi celular al mismo tiempo que finalizaba una energizante taza de café. Esto del "multitasking" no es nada divertido. Planificar un viaje laboral de improvisto está lejos de ser algo fácil, realmente no sé cómo mamá y papá pueden con un estilo de vida tan agitado, teniendo que viajar kilómetros al menos cinco veces en el mes para supervisar los eventos que se encargaban de organizar. En está ocasión tuvieron que viajar hasta Vietnam mientras que yo iría a Jeju, no había puesto un pie en el avión ya estaba deseando que todo terminara.

-Yonghee- Me llamó la menor de mis hermanas, estábamos las tres en la mesa terminando nuestro prospecto de desayuno: café y hotcakes. ¡A mamá le sangrarían los ojos! -¿Cuándo volverás?- preguntó algo desanimada.

-Si todo sale bien, estaré de vuelta el lunes por la mañana- Respondí mientras dejaba mi celular sobre la mesa, a veces podía quedarme absorta en el pequeño mundo de Gmail.

-¡Nos vamos a morir de hambre!- Exclamó Yonsung mientras se llevaba el último bocado a los labios.

-Estoy segura de que Byulyi no te dejará morir de hambre- Dije tratando de calmarla. Mal comentario, supongo.

-No, ella perfectamente podría dejarme morir de cualquier otra cosa- Aseguró Yongsun. Sentí terror cuando Byul se levantó con el plato entre sus manos y esa mirada pesada con la que muchas veces despertaba, por poco creí que se lo lanzaría pero simplemente se dedicó a lavarlo en silencio.

-Te dejé algo de dinero para que puedas pedir comida, solo serán cuatro días- Dije mientras daba pequeños golpecitos a su cabeza, realmente es una niña por más madura que quiera verse.

-Eres la mejor- Respondió y se dedicó a terminar el jugo de naranja recién exprimido desde la caja de cartón.

-Espera, ¿Te llevarás el auto? Creí que irías con tu equipo de trabajo y yo te lo iba a pedir para el sábado- Preguntó Byul extrañando más al auto que a mí, obviamente. Al final del día era otra niña.

-Lo siento Byulyi, prometo que será tuyo el próximo fin de semana- Claro que se lo prestaría, sin gasolina obviamente.

-No te preocupes, sé que lo necesitas- Respondió tranquila mientras se dedicaba a alistar su bolso.

-Además, ¿Para qué quieres el auto? No puedes andar en la calle mientras estoy sola- Alegó Yongsun mirándola fijamente y formando puños con sus manos, veía venir la primera pelea del día.

-No soy tu niñera- Respondió Byul, está vez no se contendría como con el plato pues la vi tomar el cartón de jugo. Respiré profundo y tomé su brazo rápidamente antes de que ocurriera un desastre.

-Chicas sin discutir, por favor- Supliqué como si no tuviese la fuerza suficiente para ponerlas en su lugar, no podía ponerme a pelear ni a solucionar nada en estos momentos, el tiempo no jugaba a mi favor -Ya estoy bastante preocupada por dejarlas solas, prométanme que no se meterán en líos- Promesas, la mejor forma de manipulación inventada por el hombre y mi mejor arma en un momento así.

Se sostuvo el silencio por unos instantes, sus miradas intensas y la mía rogando porque no iniciaran una batalla campal llena de vitamina C. Byul entrecerró los ojos y soltó la caja de cartón, en ese momento pude calmarme, al menos pedir compasión sí había funcionado esta vez.

-Bien, Yongsun ve por tu cosas antes de que se les haga tarde, las dejaré en el instituto- Ella asintió y de inmediato se levantó para salir de la cocina y terminar de alistarse. -Byulyi- La llamé y ella solo balbuceó sin mirarme, tenía la mirada fija en sus libros y su bolso.