14|Tarea

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Titulo: Tarea

Autor/ra: anxieteyu

Remus caminó con sus amigos por los pasillos a altas horas de la noche. Mañana sería luna llena. Ya se sentía incómodo.

"¿No lo crees, Moony?" Dijo Sirius a su costado.

Remus fue sacado de sus pensamientos. "¿Qué?" Preguntó confundido. Solo quería dormir y prepararse para mañana.

"¿No me vas a decir que no estabas escuchando?" Dijo Sirius molesto. "Estaba diciendo que puede ser una buena idea echar un vistazo a los dormitorios de las chicas y pedir prestada la tarea de ____. Ya que no lo hicimos".

"¡¿Por qué siempre necesitas copiar la tarea de otras personas ?!" Remus espetó.

"Tranquilo Moony, ¿por qué siempre te enojas tanto cuando se acerca la luna llena?"

Entonces Sirius tuvo una idea.

Una idea brillante, un poco cruel, pero brillante.

Lo ves. Remus siempre había estado muy enamorado de ____. Y Sirius sabía que tú sentías lo mismo.

"Moony. ¿Puedes ir a buscar la tarea de ____ para nosotros? Porque sería demasiado sospechoso si me fuera de nuevo a su habitación. La gente pensará que estamos haciendo cosas que no estamos haciendo".

Remus sintió que su cara se calentaba ante la idea de entrar en tu habitación. ¿En qué tipo de ropa dormirías? ¿Ya estaba dormida? Era bastante tarde.

Entonces se fue. Con un sonrojo en su rostro se dirigió hacia los dormitorios de las chicas.

Sirius corrió afuera. Dejando a Peter solo. Agarró una escoba y voló hacia la ventana de su habitación. Si no se equivocaba, te ducharías a esta hora de la noche. No eras una persona que dormía mucho.

Sirius llamó a tu ventana. Saltaste sorprendida en tu ducha. Rápidamente, agarró una toalla para cubrirse, preparándose para quien quiera que vaya a su ventana en este momento.

No había nadie en la ventana. Pensaste que lo habías imaginado. Pero entonces hubo un suave golpe en la puerta de tu habitación. Abriste la puerta y ... oh dios. Remus Se suponía que no debería verte así. Usando solo una toalla.

"____, ¿me prestas tu..." se detuvo a media frase. Mirando tu cuerpo apenas cubierto. Sus hormonas de hombre lobo entraron en acción y, sin previo aviso, entró en su habitación, cerró la puerta de un portazo y te empujó bruscamente hacia su cama.

No reconociste la mirada en sus ojos. Parecía que estaba a punto de volverse loco.

Se empujó sobre ti y tiró la toalla que te cubría. Hambriento colocó su boca en tu cuello. Besando y mordisqueando la piel para encontrar su punto débil. Fue tan repentino, y estabas confundida y excitada al mismo tiempo.

Pero querías esto. Lo querías a él. Entonces lo dejas hacer lo que quiera.

Tu respiración escapó de tus labios en un gemido cuando lamió un lugar justo debajo de tu mejilla izquierda. Él continuó torturando ese lugar. Besándolo y lamiéndolo, hasta que te quedaste sin aliento en tu cama. Te miró a los ojos. Tus mejillas estaban sonrojadas al igual que las suyas y tus labios estaban hinchados.

Entonces se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Lentamente comenzó a arrastrarse lejos de ti. El miedo se revelo en su cara. Y luego la sorpresa, mientras agarras su corbata de Gryffindor y acercándolo de nuevo.

"Nunca comiences algo si no lo puedes terminarlo".

Le susurraste seductoramente al oído.

"Oh, pero claro que terminaré esto". Respondió. Cayendo en la lujuria.

Te besó ferozmente. Sus labios eran suaves y el beso fue acalorado. Él empujó su lengua a través de tus labios. Forzando la boca para que pueda entrar. Y luego sus lenguas exploraron las bocas de los demás.

Sus labios y lengua dejaron tu boca y tú gemiste.

Literalmente se arrancó los pantalones y sin decir una palabra se estrelló contra ti. Lloraste de dolor pero a él no parecía importarle. Perdió todo el control y te embistió con locura. La cama crujía en protesta pero no le importó.

Sentiste dolor. Solo dolor. Y luego algo más cuando golpeó ese punto dentro de ti. Usted gimió su nombre y él se rió.

Se miraron a los ojos y colocaron un beso descuidado con la boca abierta en sus labios entre gemidos y insultos. Él agarró uno de tus senos y comenzó a chuparte el pezón. Rompiste. Sentiste que tus paredes se apretaban a su alrededor. Gritando su nombre. Y dijo el tuyo cuando vino.

Se desplomó sobre la cama a tu lado. Te quedaste allí en un cómodo silencio por un rato. Luego se puso de pie. Tirando de ti con él. Y te dio un fuerte abrazo, besando tu frente.

Los dos estaban sucios y se reían en silencio el uno del otro.

"¿Serás mi novia ____?"

"¡Si!"

Y durmió a tu lado esa noche. Porque se sentía bien estar juntos.

A la mañana siguiente, Moony regresó temprano a su habitación.

"¡Hola chicos! ¡Tengo la tarea!"

"¿Qué te tomó tanto tiempo? ¿Qué hiciste?"

"Bueno..."

One Shots de Remus LupinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora