Es suficiente; Jungkook

Capítulo 3

Paola

El resto de aquel día se pasó exuberantemente lento, y no volví a cruzarme con Jungkook. Llegué a verlo en la cafetería, sentado con el novio de Cara y con Yoongi, un chico que también era Coreano y estaba en penúltimo año.

-Eso es bueno- me señaló Cara, mientras se terminaba su pedazo de pizza. Ambas nos encontrábamos sentadas a unas mesas de diferencia de Jungkook- por lo menos conoció a alguien de su país.

-Yoongi domina muy bien el inglés. Podría ayudarlo con eso, e incluso a incluirlo con los otros chicos.

Aunque conocía muy poco al castaño, sentía en mí unas genuinas ganas de que pudiera adaptarse bien al instituto. Debe de ser muy difícil dejar de repente tu país e irte a vivir a uno completamente diferente donde, para peor, no conoces a nadie. Así que verlo ahí sentado, observando la comida de su bandeja con curiosidad y sonriendo y charlando con los chicos, me hizo sentir aliviada de alguna forma.

Luego de varias tediosas y largas horas de clase, me encontraba saliendo del edificio con Cara y dos chicas más, que nos conversaban animadamente sobre algún nuevo chisme- probablemente falso- que habían escuchado por ahí. Cara parecía de verdad interesada en el tema, pero yo me limitaba a asentir algo distraída.

Aunque me costaba admitirlo, estaba buscando con la mirada  a Jungkook, quien no parecía estar por ninguna parte.

-Paola ¿vamos o no?- Cara me tocó el hombro llamando mi atención. Al parecer ya habían dejado de hablar del chisme.

-¿A dónde?

-Dios, ¿no escuchaste nada?- oí como Luna, una de las chicas, soltaba una risita- Sara va a montar una fiesta en su casa hoy, y nos ha invitado.

Levanté levemente la ceja.

-¿Quién es Sara?

-La pelirroja, que está en último año- rodó los ojos mi amiga- la que tiene un hermano que está loco por ti.

Abrí mis ojos, haciendo una mueca de asco- ya me acuerdo. No pienso ir.

Levanté mis brazos, aumentando la velocidad de mis pasos. Cara hizo lo mismo, dejando a las otras dos chicas algo atrás.

-Iremos- les dijo elevando la voz, recibiendo una sonrisa de las chicas, que siguieron en la otra dirección.

-No, no iremos- le susurré, enfadada, al ver que tomaba de mi brazo- por dos razones: primero, sabes que ni ella ni su hermano me caen bien. Y segundo, ¿te has enterado de que hoy es lunes? ¿Quién diablos hace una fiesta un lunes?

-Al parecer la quiere hacer porque está planeando conquistar a un chico que está en su curso. Quiere tener una oportunidad de hablar con él y todo eso, así que hará una fiesta y va a invitarlo.

-¿Y no puede esperar al viernes para eso?- pregunté, con expresión obvia.

-Da igual Paola- contestó- el chico es Jungkook. Al parecer puso sus ojos en él desde la primera hora de clase.

Levanté la mirada. No me sorprendía demasiado, pues el chico es lindo, exótico, y era obvio que iba a ganar bastantes miradas.

-Tenemos que ir, así marcas tu territorio- dijo esto con una risita.

-¿Quién te dijo que me gusta?

-Por favor, babeas cuando lo miras. Además será divertido, y Pablo irá. Amo ir a fiestas con él porque bebe y se pone...

-No quiero escucharlo- coloqué uno de mis dedos en sus labios- si te callas iré, pero recuerda que hoy tengo clases de ballet.

-Está bien, la fiesta es mucho más tarde. Si quieres ven luego a mi casa y nos aprontamos allí.