cursed; Kakashi Hatake [editando]

Capítulo 25; "Revelations"

El dúo corría por el bosque, mientras qué la ceniza no cerraba la boca para que la liberaran. Estaba consumida por la ira, ¿Itachi en verdad la había secuestrado?

Para sorpresa de Akatsuki, aun tenían que pasar por encima de un último rival.

Jiraiya apareció enfrente de ellos, frenandolos de golpe. El Uchiha agradeció internamente que aquel viejo hubiese aparecido, pues no soportaría ver que Nashiro fuera manipulada por Akatsuki.

— Lo siento jóvenes, no puedo fingir ceguera cuando de una dama en apuros se trata. —comentó Jiraiya simpático. Nashiro miró con esperanza al Sannin. No podían burlarse de él.

— Tsk. Es el viejo de aquella vez en el hotel, Itachi. —gruñó Kisame, tomando la espada de su espalda, dispuesto a atacar a Jiraiya. El Uchiha estaba meditando su acción a futuro, no quería demostrarse tan débil. Le daría pelea al mayor y buscaría la forma en la que Nashiro fuera rescatada. Su promesa seguía en pie; el no la lastimaría. Por más que en el pasado le haya repetido más de una vez que la asesinaría, aquello solo había sido para mantenerla alejado de él.

— Jiraiya-sama. —espetó Itachi, mirando como se enfrentaba Kisame contra el peliblanco. Podía haber aprovechado aquella distracción por parte del Sannin para huir con Nashiro, sin embargo se quedó mirando como peleaban.

Nashiro miró confundida a Itachi, no quería hacerle daño, pero necesitaba escapar y no importaba si tenía que usar el chakra de su sello para hacerlo. La ceniza gruñó y se preparó para atacar a su amigo del alma.

Le metió un fuerte puñetazo al de coleta en la mandíbula.

¿Quien había dicho que esta chica estaba indefensa? Le volteó todo el rostro, hacía el lado contrario, provocando que Itachi se tambaleara y perdiera fuerza en el agarre de Nashiro. La Tayori cayó al suelo e intentó incorporarse con temblorina en sus pies.

Aquel ataque había tomado verdaderamente desprevenido a Itachi. ¿Desde cuando sus golpes se habían vuelto tan fuertes?

— Nashiro-chan no te empeñes en gastar tanto chakra, puedes arriesgar tu vida. —le advierte Jiraiya cuando notó lo que la joven había hecho.

Nashiro Tayori

Sentía mi cuerpo hormiguear y la respiración acelerada. Itachi me miró sofocado y había sido inevitable que él no llevara una mano hacia el lugar recién golpeado.

— No me jodas. —mascullé, perdiendo los estribos.

— ¡Nashiro-chan! —escuché como insistió Jiraiya defendiéndose de los golpes de la espada de Kisame.

Me sentía diferente.

Repentinamente se sintió el poder de un chakra descomunal, Kisame y Jiraiya dejaron de pelear, debido a que se alarmaron y se enfocaron en mi. La mirada de Itachi lucía sorprendida y en el reflejo de sus ojos podía observar un color aqua brillante.

¿Es este el poder del Sello del Dragón?

— S-Su pelo... ¡Se ha vuelto blanco! —exclamó Kisame algo alterado.

¿Qué?

El chakra del Sello fluía a través de mi cuerpo, me sentía mas liviana y extremadamente enérgica. Sonreí de lado, ladina. Mirando burlesca a los Akatsuki. El de la Aldea de la niebla, gruñó entre dientes y sin pensarlo dos veces se encaminó hacia mí. El tiburón iba a atacarme con su espada y por reflejo coloqué velozmente mi antebrazo contra el filo de su espada, deteniendolo de golpe. Aquello no había dolido, pero hizo que la espada de este vibrara hasta sus brazos. A los pocos segundo una grieta se creó en su espada y las escamas de esta comenzaron a caerse.