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Moon Bin y Lee DongMin tenían una relación de unos casi cinco años, tenían sus peleas como cualquier pareja, sus altos bajos. Pero siempre encontraban la forma de resolver todo y salir adelante los dos como pareja, pero hace poco habían empezado a alejarse. MoonBin creía que era por el trabajo, así que había empezado a hacer tiempos libres para ambos, pero parecía que eso los alejaba más y más.

MoonBin había empezado a sentirse mal, pero pensó que era un simple resfriado o algo así, por lo que solo tomo cosas para un resfriado.

Pero la lejanía de DongMin empezó a sentirse más, tanto que Bin se acostaba solo y despertaba todas las mañanas solo. También había notado que su tos no se había ido, y aún permanecía ahí. Tal vez debería de decirle a DongMin si podía hacerle una cita en el consultorio. Debía hacerlo. Se había parado para empezar otro día y tal vez, ese día tendría mejor suerte y podría quedarse despierto y recibir al otro.

Cada mañana él mismo se daba ánimos.

Había tenido que quedarse un poco más en la academia MinHyuk le había pedido de favor que él cerrara, porque tenía que salir temprano y bueno, Bin no podía negarse, así que se había quedado hasta tarde y ahora caminaba después de haberse bajado del bus, noto que la temperatura había empezado a bajar y ese pequeño suéter delgado que traía puesto no le ayudaba en nada. Con más rapidez camino y se vio después corriendo -bueno porque debía entrar en calor- Llego agitado, pero había llegado a su bloque donde vivía y con rapidez entro, luego de entrar al ascensor y poner su número, saco la llave.

Bin muy dentro de él, esperaba a que DongMin lo estuviera esperando despierto o por lo menos ver que estaba en casa. Pero no fue así, lo recibió el frío y desolado del piso. Con todavía un poco de ánimos entro y dejo sus cosas ahí en la entrada, prendió la luz de la cocina y se preparó algo ligero y rápido. Una vez término lavo lo que uso y se dirigió al baño debía ducharse, mientras tanto fue a su habitación y de verdad él imaginaba ver a DongMin ahí acostado en el lado de su cama, pero no fue así. La cama hecha y vacía fue lo que vio.

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La mañana siguiente Bin no despertó con los ánimos de siempre, despertó gracias a la tos que repentinamente empezó.

Se percató de un pétalo en su cobertor.

No quiso alarmarse y decidió seguir con su día.

Los días pasaban y la ausencia de DongMin en la vida de Bin era notoria, pero también la tos incremento a tal punto en que ya no podía salir sin toser y vomitar los pétalos, pero tenía que salir, se había ausentado ya demasiado en la academia y tenía que ir a dejar su renuncia y agradecerle a MinHyuk.

Con dificultad había salido, la respiración le había estado empezando a fallar, por lo que decidió pedir un coche. Agradeció a que llegaron rápido y se bajó agradeciendo al chófer, entro casi corriendo al baño, la tos llego y esta vez más fuerte, más pétalos salieron y el sabor metálico de la sangre.

Bin sabía que tenía y porque era, pero tenía miedo a ceder a la cirugía, pero también a morir. Bin se estaba muriendo solo, mientras DogMin seguía sin aparecer en casa.

Una vez un poco más calmado y como pudo limpio los pétalos y la sangre de su boca, se dirigió a la oficina de MinHyuk. Toco la puerta y se escuchó un leve pase.

Unas ves dentro, MinHyuk no tardo en sonreírle y acercarse hasta él.

—Pensé que seguías delicado —Se paró frente a él, al ver que Bin se quedó casi pegado en la puerta— Bin aún te ves mal.

Bin se atrevió a mirarlo y pudo ver la preocupación en el otro.

—Yo vengo a darte las gracias y a dar mi renuncia —Hizo una reverencia, sentía que en cualquier momento tosería y quería salir lo antes posible de ahí.

🌸Hanaki 🌸|EunBin/BinWoo|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora