Bar night

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Nota: Son las cinco de la mañana, lo escribí en un bloc de notas y dormir tan poco me está haciendo empezar a oler los colores -okno- creo que hace tiempo tenía una idea para unir a estos dos, Alexa es mi chica favorita en el mundo así que esto fue lo que salió de mi mente cansada.

La vio entrar al bar del brazo de Zackery, a simple vista eran como una pareja feliz pero, en realidad, él sabía que más allá de toda esa mierda, era ella quien tenía la capacidad de lucir bien del brazo de cualquiera, no solo el del rubio; ella... ella simplemente volaba la cabeza de cualquiera y era comprensible, incluso.

Supuso, dándole un trago a su vaso, el cual sintió un poco amargo, que su amigo fotógrafo lo estaba disfrutando demasiado, por lo que veía en su rostro lleno de risa.

Pestañeó un poco, Miles, a su lado, coqueteaba con una moza, él nunca se aburría de eso, y a él le hubiera gustado tener esa misma disposición para tomar a cualquier chica todas las noches sin parar pero nunca funcionaba, con todas las chicas con las que había estado en aquel último tour con la banda se había sentido totalmente ido, drogado, bebido y sodomizado, era como si ya no tuviera la capacidad de disfrutar una sola jodida noche de acción completamente sobrio y consciente. 

Quizás solo estaba envejeciendo y el sentido de la vida había cambiado drásticamente para él en ese último tiempo, no lo sabía, le hubiera preguntado a ella si tan solo consiguiera recuperar su voz para hablarle. 

- ¿Cómo estás? -su voz seguía siendo rasposa y encantadora, extraña, se le había olvidado por un momento que solía ser uno de sus sonidos favoritos, que incluso algunas veces, en la soledad de esos tours a los que ella no podía atender, él veía algunos videos en donde ella hacía entrevistas para MTV y algunos otros canales solo para escucharla. 

Le gustaba observar, además, sus maneras, sus pequeños tics, la forma en la que se curvaban sus labios cuando sonreía de distintos modos según su humor, con mucho cuidado de guardar cada detalle en su memoria; le gustaba observar como vestía, como por ejemplo en ese momento, cuando sus ojos vagaron por la remera suelta y los jeans gastados que llevaba. 

Ella seguía siendo una tormenta. 

Sintió miradas sobre él y se dio cuenta de que seguía sin contestarle, estaba siendo un poco maleducado.

Si tan solo pudiera explicar por qué no le contestaba sin perder su dignidad por completo. 

- Genial -murmuró y su boca automáticamente fue a caer a su vaso para no tener que continuar hablando.

La ojiazul le susurró algo a Zackery al oído y se alejaron juntos del resto.

Él apretó los puños, disgustado, aunque fuera ridículo e incluso descarado tomando en cuenta que él salía con muchas chicas -a la vez, incluso- pero era inevitable: apenas ella sonreía tan dulcemente para uno de sus buenos amigos él explotaba como una bomba. 

Él quería esa sonrisa, él quería provocarla, él quería... 

Se frotó las sienes, quizás estaba sobrerreaccionando. 

Las juntas en donde sus grandes ojos azules aparecían, iluminando el panorama, siempre terminaban igual. Ella lo saludaba, ella se alejaba, nunca podían charlar más allá de un saludo pues ambos se convertían en piedra y era un poco incómodo, el salir en grupo siempre era buena idea porque ella era escoltada por cualquier amigo de turno al igual que él, pero la situación le estaba picando demasiado y tenía que parar. 

Quizás esa era la noche de dejar de balbucear palabras de borracho, dejar de beber e ir a hablarle, aunque fuera para avergonzarse más de lo que se avergonzaba a si mismo en general cuando estaba con ella, cuando ella le hacía sentir cosas que hace mucho que debería haber dejado de sentir. 

Una pequeña información útil: Zackery Michaels es amigo de Alexa, Miles, los Arctic Monkeys y es fotógrafo.

Just some loverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora