— Despierta, mujer antigua.
Abrí los ojos de repente para encontrarme con Chris molestandome.
Estaba despeinado y con su pijama, mirandome desde arriba con una taza de cafe en la mano.
Era la mañana del jueves. Habiamos tenido nuestra noche habiatual y estuvimos despiertos hasta tan tarde que me quedé dormida en su departamento.
A diferencia mia, Chris solia despertar temprano.
— ¿Por qué demonios me despiertas tan temprano? —me quejé.
— Deja de dormir tanto, mujer antigua —se burló.
Habia contado a Chris todo lo ocurrido en la casa de los Evans. Estaba tan divertido cuando le dije sobre el encuentro con la mamá de Vee, que me habia apodado "mujer antigua" de forma divertida.
Pero era demasiado temprano para reir.
— Ya deja eso, no es gracioso —robé la taza de café de sus manos—. ¿Puedes decirme por qué interrumpes mi precioso momento?
— No es temprano. Que tú seas un oso no signific... —se interrumpió cuando vio mi cara—. De acuerdo, no te molestaré. Tu telefono ha estado vibrando desde hace un tiempo, solo por eso te desperté.
Chris sacó la taza de café de mis manos y se fue.
— ¡Eso era mio!
— En realidad no. Tu lo robaste primero —dijo desde la cocina.
Suspiré y busqué mi celular.
Al encender la pantalla me encontré con algunas llamadas perdidas de Lily.
Ella habia dicho que contactaria conmigo para la siguiente sesion.
Marqué su numero de regreso y ella contestó al instante.
— ¿Quien eeeees?
Me sorprendí al esuchar la pequeña voz.
— ¿Madison?
Escuché a la niña reír desde el otro lado.
— Oh, dios, sabes mi nombre. ¿Eres una bruja?
Eso me hizo sonreír. Sonaba tan inocente.
— Hmmm... Soy la Princesa Foto, ¿me recuerdas?
— ¡Te recuerdo! —esa niña gritó emocionada—. La tia Vee dijo que te llamara así.
— Sí... no le prestes tanta atención. Por cierto, Madi ¿puedes pasarme con tu madre? —dije con paciencia.
La oí suspirar.
— Es que mamá no me presta su telefono y... —escuché un ruido al otro lado— Madison, ¿cuantas veces te dije que no tomes el telefono de mamá? ¡Dame eso! —escuché a Lily tomarlo y las quejas de la niña—. ¿Hola? ¿Emma?
— Oh, Lily, hola. Creo que la niña estuvo dejando llamadas perdidas, es por eso que llamé —expliqué.
— Oh, no. En realidad yo fui quien llamó pero no contestabas —dijo Lily. Podia oirla luchar con su hija—. Mad acaba de robar mi telefono.
— Prestaselo de vez en cuando, solo quiere jugar —me reí—. ¿Entonces querias hablar sobre la siguiente sesion?
— Exactamente eso. Estoy emocionada y no podía esperar. ¿Estas libre el sabado? Podemos almorzar juntas y arreglar todo —dijo, sonando emocionada.
— Claro que sí, enviame la dirección y allí estaré.
— ¡Muchas gracias! —la oí suspirar—, Oh, dios. Lo siento, debo colgar. Madison esta llorando porque le quité el telefono.
Sonreí.
— Suerte con eso. Entonces hasta el sabado —saludé.
Lily se despidió rapidamente y colguó.
Arrastré mis pies fuera de la cama y encontré a Chris en la cocina. Estaba hablando por telefono y no me habia visto.
— Te lo dije mil veces, si no me crees es muy tu problema —se quedó en silencio por un momento, viendose furioso—. ¿Qué demonios? Jamas creas que puedes hacerme elegír porque ella esta primero. Ya me cansé de esto, tu quisiste conocerme pero no crees lo que digo. Llamame cuando te hayas calmado.
Chris cortó la llamada y arrojó su celular con fuerza.
— Vas a romperlo, y después tendré que soportarte quejandote —dije, entrando a la cocina y sentandome en la barra de desayuno.
Chris me miró apenado.
— Lo siento, ¿volviste a dormir y te desperté?
Lo miré fijamente.
— Otra vez, ¿por qué haces eso? —pregunté frustrada.
— ¿Hacer qué? —tuvimos una batalla de miradas. Luego de un momento, gané. Chris suspiró y se sirvió una taza de té—. No es tan importante, solo salimos en algunas citas porque ella lo pidió, nada serio. Pero acaba de ver una foto de nosotros juntos y llamó para decir idioteces.
Ahora fue mi turno de suspirar.
Chris y yo teniamos una relación muy especial, nos amabamos y siempre estabamos juntos. Pero eso era algo que los demas no comprendian del todo, sobre todo las chicas que estaban detras de Chris.
Él era muy guapo. Tenia el cabello corto y negro, ojos azules, bonita sonrisa y buen fisico. Todas las mujeres caian rendidas a sus pies.
Pero al final de todo, ninguna lograba entendernos. No creian que solo fueramos amigos, o hermanos. Me tomaban como un obstaculo y siempre querían alejarnos.
Pero ya iban tres y ninguna lo habia logrado.
— ¿Le explicaste bien que no tenemos esa clase de relación? —pregunté apenada.
— Sí, pero dice que no cree en ese tipo de amistades. No puede aceptar que una mujer duerma en mi cama. Si, como no. Lo unico que haces en las noches es patearme dormida —se quejó.
— Tu roncas y jamas me he quejado —ataqué.
Eso lo hizo reír un poco.
— Eso es porque me amas. En fin... me dio un ultimatum. Ella o tu —dijo eso ultimo como si fuera absurdo.
Y sí que lo era. Nadie podria separarnos. Aun así me sentía mal por arruinar sus relaciones.
— Lo siento —dije sinceramente.
Chris sonrió tranquilizandome.
— No lo pienses demasiado. Sé lo que pasa por tu cabeza, no es tu culpa —aseguró. Me pasó una taza de café que tomé con gusto—. El día que conozca a la indicada, ella entenderá la relación que tenemos y sabra que jamás podría apartarte de mi vida.
— ¿Qué pasa si siempre me convierto en un obstaculo cuando conozcas a alguien? —pregunté, concentrada en mi taza de café.
— Emma, tu eres todo para mi. Y quien sea que me quiera, deberá aceptarlo —me golpeó la frente con un dedo—. Pero te advierto que yo sí seré un obstaculo para quien sea que quiera salír contigo. Y lo voy a disfrutar.
— Eres increible —me quejé—. No es justo.
— Claro que lo es. Incluso cuando estaba Ryan, me encargaba de eso —rió fuerte al pensar en algo—. ¿Aun recuerdas a ese niñito de lentes?
Escondí la cabeza entre mis manos, recordando ese patetico momento.
Solo tenia 17 años. Habia sido mi primer amor, y solo habia salido con ese niño, un año mayor que yo, por un mes. Solo un mes.
No era una chica tan divertida o interesante, era más bien un raton de biblioteca. Y ese chico se aburrió facilmente.
Me dejó por mi mejor amiga de ese entonces y se burló de mi frente a toda la escuela, diciendo que ella era mas interesante.
Pero al final... no fue tan traumante para mi como lo fue para él.
Cuando Ryan y Chris se enteraron lo golpearon tanto que ese chico perdió todas las ganas de salír con chicas.
Habia sido un gran lio, y solo se habian salvado de ir a la carcel porque el chico habia tenido miedo de decir la verdad. Al final toda la escuela creyó que lo habian atacado, pero ese niño sabía que habia sido golpeado por romperle el corazón a la hermanita de alguien más.
— Aun no puedo creer que hiciera algo así —gruñí, recordando esas epocas.
Chris rió.
—Sip. Y antes de que digas algo, sí, jamas nos arrepentimos —dijo sonando orgulloso—. Incluso deberias agradecerme. Ryan lo habria matado si no fuera porque lo detuve.
— Ustedes chicos estaban locos.
— No, solo te protegiamos —Chris me guiñó el ojo—. Y eso es lo que sigo haciendo. Asi que cuando conozcas a alguien, cuentale esa historia y quizás lo piense dos veces antes de hacer algo...
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You, my favorite photograph (Pausado)
RomansaEmma es una fotografa enamorada de su trabajo, quien solo necesita a su mejor amigo para ser felíz. Después de perder tanto, jamas había dejado entrar a alguien más en su vida. No lo necesitaba... pero estaba equivocada. Por razones del destino c...