La calle estaba animadisima, todo estaba lleno de luces y la gente gritaba y reía pasándoselo bien, todos llevaban máscaras elegantes, algunas graciosas, otros espeluznantes, otras sencillas... había mucha variedad.
Era aun de día y no tirarían los fuegos artificiales hasta las doce de la noche, Klaus y Elijah fueron al antiguo metro, Finn, Caroline y Aaron fueron al bosque y Hayley y Tatia se quedaron en la casa, tenían que proteger la estaca de roble blanco (NOTA: La ultima vez que se vio la estaca fue cuando Silas se la clavó a Rebekah, desde entonces la tienen los Originales) y Marcel y los vampiros al completo iban por las calles.
-¿Algo nuevo?.- dijo Hayley a su teléfono hablando con Klaus y Elijah.
-No, amor. Esto esta desierto.- dijo Klaus casi echando humos.
Elijah observaba todo intentando encontrar una pista o algo.
-Klaus, usa los sentidos de lobo, podréis rastrearlo mejor.- dijo Tatia.
-Llevo rastreando a mis enemigos desde que tu estabas encerrada en una tumba, amor.- dijo este frío.
Tatia miro al suelo triste.
-Y Nathan es mas listo de lo que creíamos y su rastro es imposible de seguir.-
-Vale, si ahí algo nuevo, avisar.- y colgaron.
Klaus colgó el teléfono y se acerco a Elijah.
-Deberías dejar de presentarte a Tatia tan cruelmente. ¿La torturas por querer ser feliz?.- dijo este.
-Hablas como si no te hubiera hecho daño a ti también.-
-Sufrí por ella. Pero comprendo que ella solo quiere ser feliz, y encontró la felicidad, la felicidad que nuestro hermano supo darle.-
-Aaron no era mas que el duro de la familia, el mas fuerte de los siete hermanos. Si la hubiéramos conocido a partir de ser vampiros.-
-¿Te habría escogido?, ¿aun la amas?.-
-Mi corazón le pertenece a Caroline.-
-Pues no se que sentido tiene esta conversación.-