H. G. W. I. A S. |2|

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|La antigua casa de la familia Jin|

Por primera vez desde que los sucesivos escándalos con la familia Fan sacudieron a toda la nación, los principales miembros de la familia Jin se reunieron, en realidad, el resto solo estaba esperando a que viniera Jin Liwei.

Jin Chonglin se había estado quedando en la vieja casa desde que los crímenes de Fan Luo fueron expuestos al público, regresó porque su propio hogar estaba rodeado de reporteros, la vieja casa era más privada y segura.

Mientras esperaba que llegara su hijo mayor, Huang Yuyan estaba muy nerviosa, caminaba de un lado a otro, como si estuviera a punto de llorar en cualquier momento.

Jin Chonglin suspiró mirando a su madre. 

-Mamá, no estés tan nerviosa, Hermano Mayor no te comerá ni nada de eso.

-Lo sé, hijo, pero tu hermano mayor puede dar miedo a veces, ya sabes, al igual que tu abuelo. ―luego echó un vistazo a su suegra que estaba leyendo un clásico libro de poesía cerca de la chimenea.

-Hmm, de hecho, nuestro Liwei persigue el ejemplo de mi querido esposo, tu abuelo ―dijo la abuela Li sin apartar la vista del libro que estaba leyendo.

Encogiéndose de hombros, Jin Chonglin se puso los auriculares y comenzó a saltar al ritmo de la música.

Momentos después, el asistente de la abuela Li apareció y les informó: 

-El Maestro Liwei ha llegado.

-¡Oh! ―Huang Yuyan palideció y se puso aún más nerviosa.

-Yuyan, cálmate ―la abuela Li le espetó― ¿No crees que es ridículo que estés actuando tan asustada de tu propio hijo? Sé que te sientes culpable pero no necesitas actuar con tanto miedo. ¡Es tu hijo, por el amor de Dios! ¿No dices que quieres ser fuerte?

-Yo... lo siento, madre.

-Ah, abuela, no seas tan dura con mamá, ella está haciendo todo lo posible ―Jin Chonglin salió en defensa de su madre.

La abuela Li le lanzó una mirada fulminante. 

-Deja de mimar a tu madre.

-Vamos, abuela, no te enojes más con mamá. ―Jin Chonglin fue a abrazar a su abuela y le habló dulcemente.

Incluso alguien como la abuela Li estaba indefensa contra el encanto rezumante de su propio nieto, ella lo fulminó con la mirada, pero su expresión ya se suavizó.

Finalmente, Jin Liwei apareció con un gordo gato gris en sus brazos, un gato naranja también estaba posado en su hombro. 

Dos personas lo siguieron detrás de él con cosas de gatos.

-¡¿Qué demonios?! ―Jin Chonglin exclamó― Hermano mayor, ¿estás bien? Creo que tal vez deberías tomar un descanso del trabajo o algo así, demasiado estrés no es bueno, ya sabes, el estrés puede hacer que incluso la persona más sensata se vuelva loca, también estoy tomando un descanso correcto ahora. ¿Por qué no tomas uno también? 

Jin Liwei lo miró sin decir nada, y luego decidió ignorarlo, en cambio, se volvió hacia su abuela y su madre, saludándoles.

-Abuela, madre, quiero que conozcas a los niños de Xiulan y míos, el gris es Ice Cream y el naranja... quiero decir que el jengibre es Popcorn ―presentó a los gatitos con la cara seria.

-¡Pft! ―Jin Chonglin no pudo soportarlo más.

 Se dobló y comenzó a reír, agarrándose el estómago.