Lo que ellos no ven -USAMEX-

SIETE

No mires, el está cerca.
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El sábado paso tan rápido y tranquilo que el ambiente era extraño.
Tic-tac, sonaba en toda la casa pero el sonido resonaba en la habitación del más joven,el joven José Maria dormía tranquilo en su habitación, se sentía protegido pero le molestaba el sonido, somnoliento se levantó de la gran cama.
El pequeño Chema bajaba las escaleras.
Nada,ni un alma,miró el gran reloj, tan viejo, "juraría que ese reloj estuvo antes de mi abuelo España" pensó mientras se acercaba aquel objeto.Observo con tranquilidad al gran reloj de madera,su mente se detuvo al recordar las palabras de su madre "debería mandar a reparar ese reloj, yo creo que la batería se acabo porque ya ni se mueve".
Rápidamente se alejó, su piel se volvió tan blanca, tartamudeaba palabras sin sentido, se había quedó paralizado del miedo.
Lágrimas resbalaban de la mejilla del pobre chico, no se podía mover, quería que su madre o padre hasta sus hermanos lo sacaran de su crisis, maldecía ser tan miedoso, tan cobarde,porque no podía ser como el.
-José, mi pequeño chemita- su corazón por un momento se detuvo, era su voz era el-que pasa mi pequeño, le dije a tu padre que volvería-
Por inercia volteo, era el.
Era el...
Todo estaría bien.
Si no fuera por un pequeño detalle...

Él estaba muerto.
El lo había visto.
El mismo vi como se disparó.
El había presenciado su muerte.
José María lo ignoró ,camino de espalda y se volteó para volver al piso de arriba,no volvería a tener un ataque, no quería ver a su familia sufrir.
Sin querer mando a la mierda su ansiedad, su respiración volvió a la normalidad. Pero como toda suerte se acaba, el joven se resbaló gracias a su torpe paso regresando al primer piso,se sentó en el piso tuvo suerte no se lastimó solo un pequeño rasguño pero no pasó mayor, levantó la vista, el sigue ahí sus miradas se conectaron por un momento.
-¿José? ¿Qué pasa? Soy yo M...-alguien más lo llamo, al supuesto "fantasma", alguien más estaba en la casa de sus padres.
-vámonos- su voz eran tan profunda y grave, su piel se puso de gallina, "esa voz será el que..." sus pensamientos volaban arriba de su cabeza,el ambiente se volvía tranquilo y de un momento aquel miedo se esfumó, ellos se habían ido.
Trago seco en el piso, se levantó, algo estaba claro no iba dormir solo esa noche. Ya tuvo suficiente con lo que vio, pero tenía una duda, ¿Quien era el?.
Subió las escaleras ya con cuidado, lo estaba pensando "creo que sería muy infantil ir a dormir con mis padres, José María ya tienes más de 100 años ya no eres un crío ya tienes la aparecía de alguien",una puerta se abrió provocando que un grito de lo más "masculino" se escapara de sus labios.
-¿José? Ya pasan de las 2 ¿Que haces despierto?Estas muy pálido ¿Que paso?¿te encuentra bien?- el moreno se acercó a su hijo-¿Chema?- el más alto estaba llorando,por un momento pensó que era alguien más, tenía mucho miedo, pero sabía algo, lo que vio solo era su imaginación, no era la primera vez que el veía algo que ellos no veían. Volvió a la tierra al sentir los brazos cálidos de su madre.
-Tranquilo mi pequeño, mamá esta aquí,no importa qué tanto crezcas, siempre estaré para ti. No importa que,siempre será el pequeño de mamá-El mayor consolaba al más joven, ya se encontraban en el suelo en un cálido abrazo, seguirían en aquel suelo si no fuera por los brazos de alguien más que los levantó, con tanta facilidad.
-Me pregunto como diablos no pesan si comen como si fuera su último día- El de cincuenta estrellas había cargado a su amigo y a su hijo juntos,era una situación extraña,ellos eran extraños.
-me estás diciendo gordo,gordo- se quejó el Mexicano mayor, mientras que el más pequeño de edad se encontraba escondido entre los brazos de su madre.
- Ajá -rodó los ojos y volvió a entrar al cuarto,se acosto de nuevo en la cama.
Acariciaba el pelo de su hijo, México conectó miradas con su mejor amigo, sabían que el más pequeño tenía problemas, probaron de todo para que el pequeño Chema no fuera tan ansioso y nervioso pero sabían que el es así y no lo podía juzgar. Ellos sabían que diciendo que se tranquilice no funcionaría ellos han experimentado eso y sabían que era muy difícil de controlar.
-Chemita-hablo el estadounidense mientras trataba de clamar los nervios de su hijo menor- sabes muy bien que tu madre y yo te amamos y estaremos para ti. Pero no podemos ayudarte si no sabemos qué fue lo qué pasó- José apretó un poco más el agarre de su madre sin dañar al mismo, negaba con la cabeza, "no tengo nada que peder, de todos modos ellos son los que me cuidaron, cuando nadie más lo hizo,ellos me dieron un hogar ¿por que no confiar?" Su mente en otro mundo,suspiro sabía que debía empezar a dejar de ser un miedoso y hablar ya no tiene 50 años ya no es un niño.
-Mamá, Papá los amo, solo que aún lo veo a él, siento que fue mi culpa que se fuera, que pasara eso...- la habitación se quedo en silencio- aváncese lo veo pero se que él ya no está aquí, aún no lo supero aún lo extraño-el mayor de los tres abrazo a su hijo junto al moreno.
-¿estás llorando,gringo?- la voz del mexicano mayor se oía quebrada el también estaba soltando lágrimas.
-solo que hace mucho que no escuchaba su voz-México apretó un poco a su hijo mientras reí de manera suave.
-José, se que no quieres estar aquí, si quieres le puedo pedir a alguien más que cuide la casa y te vas a...-Chema levantó la cara del pecho de madre, le recordaba cuando él era pequeño, siempre fue muy apegado a ellos y lo sigue siendo.
-no, yo me quedaré a cuidar la casa, si pasa algo yo los llamaría,ustedes llevaban organizando esto desde hace mucho no quiero arruinar su viaje, parte que ya debo aprender a estar solo al menos por un tiempo- se callo un poco y soltó a una pequeña risa- no quiero volver a esa casa de locos, digo si quiero a mis hermanos pero tienen un tornillo suelto-suspiro hace mucho que no hablaba y se sentía raro, él nuca fue de muchas palabras y mucho menos desde que la persona que más amaba aparte de sus padres se fuera.
-me hablaron hoy en la mañana, me preguntaron si era normal que el tostador se esté incendiando-suspiro el moreno - aún no entiendo como siguen vivos sin mi-
-siguen vivos porque saben hacer lo básico,fue buena idea que nos enseñaste de forma equitativa, realmente no sabría ni hacer un huevo si no fuera por ti- sonrío el más joven.
El moreno frunció el ceño,los dos restantes sabían que había recordado todos esos momentos donde casi se matan por intentar preparar un solo huevo revuelto o cuando casi se mueren por una intoxicación.
-aunque ya sepas cocinar yo seguiré haciendo el desayuno, quiero evitar volver al hospital, hace mucho que no voy y no quiero volver- el de cincuenta estrellas y pelo avellana empezaron a reírse- la verdad no entiendo porque los sigo aguantando-suspiro y aprovecho en la posición que estaban (U.S.A estaba abajo el mexicano arriba de él y José se encontraba en el pecho de México)le dio un codazo en la barbilla de su mejor amigo y después le pellizco el brazo del mismo,no tardo en quejarse.
-¿y Chema que?, el también se rio-
-el es mi bebe- dijo mientras volvía a abrazar a su hijo de manera protectora, el más alto suspiro, ¿cuantas veces había suspirado por su amigo?, realmente lo volvía loco.
Los minutos pasaron hablando entre los tres hasta que de a poco fueron cayendo dormido, desde Chema hasta que el estadunidense cerrara los ojos, pero mates de cerrar los ojos  vio algo más.
Solo era una sombra, una simple sombra.
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Ya era de día los tres estaban desayunado tranquilamente, faltaba el canadiense que apenas estaba bajando, seguiría dormido si no fuera por el hecho que casi se muere por el último escalón que olvidó que existía.
-buenos días- se estaba estirando y bostezo más de una vez antes de llegar a su plato, era un plato de cereal, tomó la miel de maple y puso un poco en su cereal.
-¿como dormiste hermano?- pregunto con "inocencia" el de peli-avellana.
-muy bien- estaba tomando la leche de su cereal, hasta que sus ojos se abrieron tan grande, y las pocos segundo se estaba ahogando con el cereal al darse cuenta.
El mexicano ayudaba a él más alto a tranquilizar su respiración, después le dio un vaso de agua.
-come despacio, si no pasara de nuevo-pero se hizo oído sordo dejó el vaso el mexicano palmeaba la espalda por el susto.
-José Maria habló- se paró en la silla y lo señaló
-¡Canadá! ¡Siéntate en la silla y sabes que es de mala educación apuntar!- Lo sentó en la silla y lo regañó un poco más.
-Lo siento-s disculpó Canadá,su hermano miraba todo la escena, "de donde había salido tan dramático su hermano, de seguro de su madre Francia." Pensaba el mayor de los cuatro.
-Por los cielos aún tu voz suena como la de un niño- José le estaba dando gracia como su hermano Canadá se comportaba, era muy impulsivo y demasiado hablador.
El Americano miró la hora faltaba al menos dos horas para irse,ya empezar a tomar las cosas si querían llegar temprano.
Volvía prestar atención a las aciones de su hermano, el mexicano le jalaba las orejas mientras lo regañaba, rodó los ojos y suspiro.
-México si le sigues jalando las orejas a mi hermano estarán más rojas que su cabellos-el mexicano soltó las orejas del más alto del comedor.
-Lo siento-se sobaba las orejas mientras que un pequeño puchero salió de él, en serio seguía siendo el mismo infantil y imperativo Canadá.
-será mejor ir preparándonos para ya irnos- comentó U.S.A, todos asistieron.
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Ya era hora de irse estaba colocando las maletas en el carro del mayor.
-Canadá es necesario todo esto- José estaba ayudando a meter las maletas de su hermano mayor.
-uno nunca sabe-dijo mientras terminaba de colocar la última maleta.
-una licuadora no me parece necesaria- dijo mientras caminaba a la casa de sus padres.
-vuelvo a decir,uno nunca sabe- ya estaban en la entrada de la casa.
-ya es todo- el canadiense poso sus manos en la cintura y con orgullo infló su pecho.
Los tres restantes se miraron y suspiraron.
-¿Que?- Canadá estaba confundido.
-nada, ya vámonos- los cuatro ya estaban en la entrada, el mexicano le repasaba una y otra vez a su hijo lo que tenía que hacer.
-si ya se mamá no tienes que recordarme todo eso, ya me lo anotaste- el mexicano menor levantó una libreta-no te preocupes yo cuido las casas, váyanse tranquilos yo estaré bien y las casas igual.
El mexicano abrazó a su hijo este le correspondió sabía que su madre era muy sentimental,el canadiense y estadunidense se miraron y también abrazar al más joven.
-Es momento de irnos, volveremos en tres semanas-el canadiense con felicidad se separó del abrazo y camino hacia el carro.
-como le decimos que la primera parada no será en Canadá-dijo con nervios México.
-a tenido peores decepciones-dijo U.S.A
-¿como que?- dijo curioso Chema.
-cuando se dio cuenta de que santa no existe o el hada de dientes -dijo con seriedad el americano.
-¡Si existen, yo lo sé!- los mayores solo rodaron los ojos.
-va ser un viaje muy largo- México rio ante el comentario de su mejor amigo.
-si que lo va ser-empezaron a cambiar hacia el carro.
Ya todos estaban listos, Chema se acercó y el de cincuenta estrellas bajo el vidrio.
-que tenga un buen viaje, me traen algo, llámame cuando lleguen,cuídense-los tres se despidieron de José y de caguamo que estaba  en sus brazos.
Desde la ventana observa aquellas sombras,observando cada uno de los movimientos de los cuatro, y como siempre desaparecieron sin dejar rastro.

-¿Ya llegamos?- pregunto por décima vez en tan solo 2 minutos de su partida.
-por décima vez, no-contestó con malhumor su hermano-y si vuelves a preguntar vamos a tomar medidas- el mexicano levantó la vista de su celular,tomó un paquete de dulces y se lo dio a Canadá, este lo acepto con gusto.
-eso lo callará por lo menos hasta que lleguemos  al aeropuerto-tomo el hombro de su amigo para tranquilizar al mayor, era un lío viajar con Canadá por ser el más joven, pero él fue quien arregló todo.
-¿quieren?-el menor extendió la bolsa de dulces.
-no gracias,te los traje para ti-el mexicano despeino a su amigo,le recordaba a sus hijos,era tan infantil y como todo hermano menor le encanta molestar a su hermano mayor.
Amaba esta vida, amaba a su familia.
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Aclaraciones
- Como Canadá fue criado por México y Estados Unidos los "hijos" de ellos lo ven como el hermano mayor.
-José Maria no es mudo, solo dejó de hablar cuando alguien que amaba se fue.
-Como leyeron Chema al ser el más pequeño se siente que es el más miedoso, pero realmente solo es demasiado nervioso, está en terapia y toma medicamentos para controlar sus nervios, el se propuso dejar ser tan tímido y poder valorase a si mismo, por eso acepto remplazar a su padre.
-Canadá al ser el más joven de sus amigos, suele ser el más infantil y desde otro punto parece una pequeña familia.
-Sobre la relación de México y Estados Unidos solo son mejores amigos,no son pareja, pero hace más de 30 años ellos estaban casados, luego lograron "liberarse", ellos se siguen viviendo juntos a menudo porque se acostumbraron .
Ya no se por que les digo un día si al final termino publicando otro día, realmente lamento no cubrir mi palabra sobre las publicaciones, pero he tenido problemas tanto de internet como personales.
En serio estoy sorprendida que gente lea esta historia,se aprecia y me encanta que comente, eso me alegra el día.
Si tiene una pregunta con gusto la contesto.
Gracias por leer esta historia de mierda.
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