Don't Call Me Angel; larry stylinson [bottom!louis] [traducción]

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Canción: I like it by The Marías. Les recomiendo que la escuchen ;^)

Es un anochecer a principios de julio. Louis ya ha estacionado su motocicleta, el chico está vistiendo sus prendas más ajustadas y tiene una delgada capa de brillo labial. Las noches en Nueva York están bañadas con luces rojas y blancas, las personas se mueven como un organismo combinado que camina por las calles. Es un viernes por la noche, uno de los días más ocupados de la semana y el más caluroso del mes.

No le toma mucho tiempo encontrar el camino a su trabajo. Es en uno de los clubes nocturnos más populares de Manhattan, el cual solo contrata a Omegas intérpretes, "Muñecas de la manzana" destella en luces brillantes color cereza y rosado. Este lugar atrae a cualquier Alfa o Beta para que pasen su noche sentados en una silla acolchada admirando como Omegas exponen su cuerpo ante ellos. Tiene la reputación de ser el primer destino de Alfas ricos que poseen dinero para derrochar. Es una garantía tácita el que ellos se retirarán con un Omega en el brazo, va en contra de las reglas del club, pero Louis es el culpable ya que se escabulle con Alfas y Betas para conseguir algo de dinero extra.

Louis está dándole un baile privado a un hombre mayor, está entre los brazos del Alfa cuando percibe un aroma familiar. Casi lo toma con la guardia baja, se le corta la respiración y el viejo Alfa piensa que es por él, por esa razón agarra con más fuerza las caderas de Louis y baja una de sus manos para acariciar la polla del Omega a través de sus bragas.

—Puede tocarme donde desee, menos ahí señor.— Un fastidio personal de Louis es cuando los clientes desobedecen reglas tan simples. Como no tiene permitido mostrar disgusto en su trabajo, él le regala al Alfa una sonrisa juguetona y chasquea su lengua.

El hombre mayor gruñe en voz baja y aleja su mano para sostenerse de los brazos de la silla. Sus ojos oscuros están enfocados en el culo de Louis que está cubierto con unas sensuales bragas de encaje. —Eres el Omega más hermoso que he visto.

—No me halague, amor.— Louis sonríe tímidamente. Sabe que hay tensión sexual sofocando la habitación, aunque ésta solo proviene de una persona. —Dígame.— Se inclina sobre el Alfa y se encoge al percatarse del pesado olor a alcohol que desprende el hombre. —¿Con qué nombre me llamaría?

El Alfa respira pesadamente, una gota de sudor baja desde su ceja en el momento que los delicados dedos de Louis masajean sus muslos. —Eres un sueño hecho realidad. Un ángel de carne y hueso.

Louis se levanta y estrecha sus ojos. —No me llame así.— La rabia que crece dentro de su estómago es casi inaguantable, pero logra poner una sonrisa falsa en su rostro. —Su tiempo se ha acabado, señor.— Los ojos de Louis caen hasta el bulto inconfundible que está atrapado dentro de los pantalones del Alfa.

El hombre bufa profundamente, saca su billetera y deja un fajo de billetes en la mano estirada de Louis. Su cabello escaso está despeinado y su corbata está deshecha. —Si te pago por otro baile, ¿podría...— Va bajando su tono de voz con sus ojos enfocados en la entrepierna del Omega.

Louis suelta una suave risita burlona y cuenta el dinero mientras camina hacia el guardia que está parado junto a la cortina. Se inclina y susurra en su oído. —Le faltan veinte dólares.

Louis sale de la habitación privada e ignora los gritos de desafío del Alfa. El corredor está oscuro y adornado con luces neón rosadas, los altavoces reproducen la misma canción que la del escenario. Cuando emerge del pasillo oscuro, ve a uno de sus compañeros de trabajo dando el espectáculo.

Es uno de los Omegas con los que Louis ha hablado varias veces. Su nombre escénico es "Cinnamon", tiene su edad y proviene de las costas de Malibú. El chico tiene poca ropa y se balancea alrededor del tubo, está cubierto con purpurina y articula suciamente la canción.