74 - EL CLON DE LORIE

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Draco

No sé qué narices habrá estado hablando mi madre con la pared, pero parece ser que ha funcionado. Tras deshacernos de las trampas de tres de los pasillos sin grandes problemas, nos encontramos con la duda de los otros dos. Sabemos que uno nos conduce a Hades y el otro a nuestros amigos, pero ¿cuál es cuál? Por lo visto, Hades conoce demasiado bien a mi madre y se imaginó que haría hablar a las paredes. Es por eso que creó una ilusión.

—Fiona, ¿puedes sentirles? —pregunta mi madre.

Mi hermana sacude la cabeza negando y yo no puedo evitar esbozar una mueca de disgusto. Las cosas parecen ir cada vez peor.

—A ver. Pensemos con claridad —nos indica Sebastián —. Tenemos dos túneles y, de todos modos, debemos entrar en ambos, pero nuestra prioridad es rescatar a nuestros amigos por lo que no podemos arriesgarnos a equivocarnos.

Todos asentimos. Más claro no lo ha podido explicar.

—¿Y si no separamos y entramos en ambos a la vez? —sugiere mi madre.

—No sé, Cris. Es demasiado arriesgado —le responde mi padre —. Te recuerdo que juntos somos más fuertes.

—Lo sé, pero si nos dividimos, los que encuentren a Hades pueden distraerle mientras el resto rescatan a nuestros amigos.

—Buena idea —dice Sebastián —. Una vez que estemos todos reunidos de nuevo podremos actuar. Y espero que esta vez Hades no se nos escape.

Un escalofrío me recorre la espalda. Es la primera vez en mi vida que entro en acción, que yo recuerde, y es algo que me asusta terriblemente. Y más si pierdo el apoyo de mi familia. No sé si sabré estar a la altura que se espera de mí.

—¿Puedo ir contigo?

Miro hacia mi lado y veo a Ángela suplicándome con la mirada mientras se agarra con fuerza a mi brazo.

—Por supuesto que vienes conmigo —le respondo seguro —. No pienso permitir que nadie te haga nada.

—Gracias —contesta agarrándome con más fuerza mientras me dedica una tierna sonrisa que yo le devuelvo. 

Le cojo por la cintura y le acerco más a mí. En estos momentos y con ella a mi lado me siento capaz de cualquier cosa. Es como si su sola presencia me diera fuerzas.

—¿Y cómo lo haremos? —pregunta Christen —. Los grupos, digo.

—Debemos procurar que sean lo más fuertes posibles —responde mi madre —. Veamos... Tenemos dos lobos por lo que Sebastián irá en un grupo y Max en el otro. Lo mismo ocurre con Fiona y Fiona dos. 

—Entonces, según eso, yo iré con Draco, ¿no? —concluye Christen.

—Así es —contesta Sebastián. - Sois más fuertes juntos y lo mismo sucede con vuestros padres. Eso nos da ventaja.

Enseguida se reparten los grupos. Christen y yo vamos con Max y Fiona mientras que mis padres lo hacen con Sebastián y Fiona dos. Entiendo perfectamente por qué lo han hecho así. Mi hermana y yo somos los menos expertos en combate y magia y seguramente necesitaremos ayuda experimentada. Hubiera preferido a Sebastián, pero han insistido mucho en Max. Después de todo, es el espíritu guardián de Ángela y mi guardián.

Cogemos el pasillo que nos toca y comenzamos a caminar por éste. En una mano llevo a Ángela y en la otra mi daga preparada por si la tuviera que usar. Tras un buen rato andando, llegamos a una sala circular.

Mis ojos se abren como platos al ver la escena que allí se presenta. ¡El clon de Lorie se está montando un trío con Rufus y Kael! No sé si sentirme asqueado o decepcionado ante semejante situación.

DC XII:LA REINA DEL MUNDO √Donde viven las historias. Descúbrelo ahora