Desconocidos. -Natanael Cano Y Tu (PAUSADA)

Cap. 2

Día siguiente:
Llegue a la escuela, me senté, la primera materia era matemáticas, no me gusta que me toque esa materia a primera hora me pone de mal humor.

Y como él día de ayer mi mejor amiga falto de nuevo, cuando la vea juro que la asesinare.

-Te hablan. -Dice un compañero interrumpiendo mis pensamientos de como asesinar a mi mejor amiga.

Mire quien me hablaba y era la maestra de ingles que es mi tutora.

-¿Como estas?

-Bien y usted?

-Bien gracias. Mira necesito que me ayudes a quitar estos papeles y que pegues estos. -Dice ella, tocaba él aburrido periódico escolar y tristemente siempre yo era la que lo quitaba y ponía. No se por que.

-Hey. -Dice una voz, volteo y era él chico que casi me mata.

-Hola. -Respondo

-¿Que haces? Marlen.

-Nada que te importe.

-Vine por ti. -Lo miro sorprendida y lo miro con él ceño fruncido.

-¿Por que por mi?

-Soy tu tío falso, pedí permiso para sacarte, es una oportunidad de oro, te salvas de matemáticas. Esa horrible materia. Te sacare hablaremos por él camino y te llevo a casa.

-Lo siento estoy ocupada.

-Te ayudo y terminamos rápido. -Se acerca y comienza a despegar él papel.

-¿Como sabes donde estudio?

-Ayer llevabas uniforme, y tengo conocidos que estudian aquí mismo o estudiaron.

-¿Eres de aquí?

-No, solo vengo por trabajo.

-¿En que trabajas?

-Maestro. -Lo mire mal, un chico con esa pinta no es maestro pero bueno, las apariencias engañan -No te creas soy cantante.

-Ah que bien. Solo te diré algo no me iré con un desconocido así que no pierdas tiempo quitando esto. ¿Si?

-Mmm. -Termino de despegar todo y comenzó a pegar las hojas y cartulinas.

-Estoy hablando enserio, no pierdas tu tiempo pegando esto.

-Lo que quiero lo consigo y tu te iras conmigo.

-Conmigo sera distinto.

-Tengo algo que reclamarte. Me metiste tu nombre no es Marlen.

-Pues que quieres, que de mis datos a un completo desconocido? Pues no.

-En cierta parte tienes razón. Sabes ya vamos, en serio quieres quedarte aquí?

-Pues no pero es mi obligación.

-Ya ven. -Me agarra de la mano y me saca. -No te pondrán falta en ninguna materia.

-¿Y mi mochila? Me la van a robar...

-Bien ve por ella. -Entre corriendo, obvio no iría con el. Regrese al periódico y continúe con mi trabajo.

-¿Que esperas vamos?

-No iré contigo.

-Ah que terca.

-No dejame en paz.

Pasaron unos minutos y Natanael seguía insistiendo.

-Me iré contigo si respondes unas preguntas.

-Te escucho. -Se sienta en él suelo y se cruza de brazos mirándome.

-¿Nombre?

-Natanael Cano

-¿Edad?

-19 años

-Eres mayor, menos me voy contigo

-Por cuatro años, aparte ya estoy respondiendo tus dudas.

-Bien, ¿Por que quieres que me valla contigo?

-Quiero conocerte mejor.

-Bien, eso era todo.

-Vamos. -Termine de pegar la última hoja con información y finalmente salimos de la escuela.

Natanael me llevo a casa, yo le agradecí pero después caí en cuenta.

-¿Por que mierda me subí con un desconocido?

-Quizá este desconocido se te hizo lindo

-Eres un idiota, acosador, feo e irritante, ser humano. -Digo eso y me bajo para entrar a casa.

-Tu igual mocosa.

Lo ignore y entre a mi casa, mi mama trabajaba y mi hermano en la escuela.

Me puse a ver tv.

Día siguiente:
Lo mismo de cada aburrida mañana, al salir de la escuela me toco irme sola, odiaba tener que ir sola, era algo que no soportaba, después de mis experiencias le agarre miedo a las calles donde hay muchos autos.

-Tu mocosa. -Volteo y era ese molesto chico.

-¿Cuando dejaras de acosarme?

-Cuando dejes de molestarme.

-¿Te molesto yo?. -Suelto una carcajada irónica.

-Si eres bien mentirosa Marlen.

-Ya supera eso. ¿A que viniste?

-Vine a verte, digo a recogerte, hay muchos peligros en la calle.

-Puedo irme sola, tengo 15 años y puedo cuidarme bien.

-Eso no es así. Él otro día mire como un anciano asqueroso te miraba y como caminaba tras tuyo, y tu en tu mundo con esos feos audífonos.

-¿Cuando paso eso?. -Digo asustada. -Y como sabes todo eso? ¿Acaso me espías?

-Algo así. Anda sube, te llevo a comer y luego a casa.

-Mis padres me enseñaron a no irme con desconocidos.

-No me importa, no soy ningún desconocido. Aparte ayer te fuiste conmigo.

-Claro que lo eres. -Me agarró de la muñeca y me subió a su auto. -Ayer es ayer. Es pasado.

-¿Por que eres tan así?

-¿Como así?

-Tan... No se como tu.

-No pues ya supe. -Me cruce de brazos y él arranco. -Iremos a mi departamento, en la calle es algo peligroso, me meto en líos.

-Me da mas miedo tu casa.

-Ni que te fuera a hacer algo.

-Uno nunca sabe.

-Ridícula.

-Mira calmate si no quieres mi puño en tu fea cara.

-Uy si que miedo. -Lo miro mal y me cruzo de brazos.

—Y me voy contigo porque mi vida es aburrida y quizá "molestarte" ayude. —Me mira mal y luego ríe.