Santiago.
Ya era viernes y ya había pasado la semana de clases, hoy por suerte Lara y yo nos ignoramos en todas las materias.
Así se podía estar en paz, a pesar de que los chicos siempre me decían que no podía dejar pasar todo lo que me había hecho, pero yo de verdad ya no quería más problemas por ahora.
Albert me llevo un momento a hacer compras al mercado, en seguida me tope con la loca de Jessica en el supermercado.
–Hola Santiago, mi vida.
La había evadido durante dos semanas, cambie hasta mi número de teléfono. Pensaba que con esto le dejaba claro que no me buscara más.
–Ya te dije que no me buscaras más Jessica, te lo dije aquella noche en el bar cuando me golpearon, ¿te acuerdas? - dije calmadamente para que no formara un drama.
Por culpa de Jessica había conocido a Lara, aquella noche en el bar, por culpa de ella casi perdía un ligue como lo era Alison, que esa noche igual tuvimos sexo. Y tal vez por culpa de ella había quedado en ridículo más de una vez.
Jessica tenía unas ojeras enormes, se notaba que no dormía desde hace semanas. Pero a pesar de ser loca, era muy sexy.
En seguida sacudí mi cabeza para no pensar en tantas tonterías.
–Te dije que te amaba Santiago en serio, me gustas mucho. - ya haría otro drama, esta chica tenía problemas.
– Basta Jessica, déjame en paz y si me sigues acosando llamare a la policía y créeme que será peor. - le dije, pagué mis cosas y me fui.
No mire atrás, no podía seguir llenando su cabeza de mentiras o de ilusiones, esa chica en serio necesitaba un psicólogo.
Entre al carro y Albert me llevo a la casa, en el camino no podía dejar de pensar en cómo Jessica reacciono al verme. No podía sentirme mal en estos momentos de la vida, no después de llevar un récord perfecto en acostarme con mujeres.
Pero igual no podía evitar sentir remordimiento.
En la casa me esperaban los chicos, estaban tomando cerveza.
Tiago, Eric, Luke y Jhon, estaban todos sentados hablando, hasta que me miraron con mi cara de pocos amigos.
–No me digas la razón de tu cara, solo puede haber una. - Me dijo Tiago.
Y ahí todos en unísono dijeron: Mujeres.
Me acerqué a la mesa fría de granito y me senté con ellos.
–Esto no puede ser peor, después preguntan porque uno las ignora después. - dije.
–Hace falta poner una canción de Ricardo Arjona, ese guatemalteco de verdad que tiene canciones muy buenas. - dijo Luke.
–Ni siquiera sé quién es Ricardo Arjona Bro.- dijo Eric.
–Si tienes gustos raro en la música, además que escuchas puros latinos. - termino de decir Eric.
–Termina de poner la canción de Ricardo Arjona, sé que te refieres a "mujeres". - dijo Jhon.
–Así que tú también sabes quien es.- dijo Tiago.
Pusieron la canción y en ese momento sentí que ambiento el lugar, parecíamos hombres solteros y despechados. Que no podían vivir sin mujeres.
–Creo que de verdad todo lo hacemos por ellas, como dice la canción. - dijo Eric.
–Wow, en serio no sabía que entendías español, de verdad no te creo tan capaz de entender muchas cosas Eric. - dijo Tiago y todos nos reímos.
Eric, a veces era un completo cabeza hueca de verdad, solo una masa de tejido corporal andante, casi un Johnny Bravo.
Hablamos de lo sucedido con Jessica.
–En serio hasta siento que es patética ya. - dije.
Sabía que no sentía eso, sentía lastima, sentía remordimiento. Pero esas fueron las palabras que salieron de mi boca.
–De verdad está loca, debería entender que solo la utilizaste por su pussy...-
–Ya cállate Eric, en serio. No hace falta que digas esa palabra para referirte a la parte de una mujer. Que baboso eres. - dijo Luke.
Luke siempre de educado con respecto a las mujeres.
– ¿Y cuéntame Santiago, Blair sigue molesta contigo? - pregunto Tiago.
–Creo que hasta esta peor. - entonces respondió Jhon.
–No saben ni siquiera el show que hizo aquí, de verdad que nunca me terminara de caer bien. - dijo mi primo finalmente.
Jhon lo decía por lo que había sucedido con Anastasia, sabía que en algún punto lo había molestado.
Y era verdad, llevar a Blair era muy difícil por su carácter de niña mimada y aun así nosotros la soportábamos y aparte de nosotros, sus amigas.
–Créeme que terminamos peor. - dije.
–Y los problemas con la machorra cómo van? - dijo Tiago.
Abrí mucho los ojos para que los chicos se callaran. La razón era que Jhon no sabía nada que había sucedido en la última semana, ni siquiera que estudiaba con Lara.
–De que hablan chicos? - dijo Jhon.
–De una nueva chica, que se está ligando tu primo, le decimos la machorra. - dijo Luke para desviar el tema
En las últimas semanas, Lara había sido una pequeña piedra en mi camino. Esperaba que ya los problemas con ellas acabaran. Todavía me quedaba solucionar lo de la moto, pero sabía que eso lo hablaría con ella después.
Los chicos no paraban de reír y de tomar. Faltaba solo las mujeres para disfrutar más. Sabía que Jhon se negaría, pero por lo menos unas mujeres para los demás, no interfería con su relación.
En ese momento me llamo Albert y me dijo que Blair venia entrando a la casa.
Camine lo más rápido posible a la puerta, a pesar de estar mareado.
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Aléjate o déjate llevar
Teen FictionLara y Santiago, muy diferentes pero al mismo tiempo tan iguales, con las mismas ganas de comerse al mundo. Lara es una chica fuera de lo común, desde su aspecto hasta su personalidad ruda y fuerte, chocara con Santiago al demostrar de verdad que un...