Capítulo 47 tres latidos

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-Por sierto me llamo Marcelo Ebrard, mis padres son de descendencia inglesa, bueno creo,
Dennis aparece en la habitación con una tasa de chocolate.
- Por fin se conocen, ahora los dos ¿están dispuestos a dejar sus sentimientos atrás y entrar ala venganza?
- claro, dice Marcelo dándome una palmada en la espalda.
- Antonio, se que las amas pero, sólo te están utilizando. ¿Que no lo ves? Dennis se dirige  ami con esas palabras
- Si lo sé pero, no se estoy muy confundido.
- Para que veas que es verdad, tendrás que darte cuenta tu mismo, Marcelo me dice mientras ocultas sus lágrimas.
Todos salimos de la casa siguiendo a Marcelo.
Las calles están frías ya caía  la noche, el sol se estaba escondiendo y la anochecer nos saludaba con una dosis de dolor, mientras caminaba mi mente estaba confundida, no podía dejar de amar a alguien ¿quizás sólo  muriendo?.
La verdad es que mi mente era un solo enredó,
Marcelo Me golpea la cabeza y dice
- El dolor es parte de la vida, tienes que darte cuenta que esto es sólo  una etapa que pasamos varias veces hasta que la podemos afrontar con el dolor de nuestro ser, pero no te preocupes los dos estamos en esto.
Dennis sólo miraba hacia el frente, y se lamentaba por la herida que tenía en el pecho y eso me dijo  entre una voz quebrada y tragando saliva.
- ¿no visitaste a tu padre al cementerio verdad?
- no y no lo pienso hacer.
La verdad no quería saber nada de mis padres y nose que estoy haciendo con mi poca vida, sólo soy un  peón de su juego pero ya no me importa, me siento como si estuviera en una familia de mentira pero, se que cuando se acabe  todos esto vamos a desaparecer y vamos hacer como si esto no fuera pasado,
Llegamos a un parque, la luz estaba espabilando debajo de una lámpara se estaban besándose una pareja.
- ¿Dime que hacemos aquí?.
- Tranquilo deja que llegue kaori, verás quien es tu querida amada.
- ¿de que me hablas?
Marcelo sonríe, mientras estaba sentado en una banca del parque, veo como aparece en un carro kaori y meredid acompañadas
Y veo como sonríe, mi corazón dio 3 latidos antes de que mis lágrimas atravecera mi rostro llenado el dolor de mi corazón.
Mi garganta se preparó y sólo pude gritar
- ¡¡¡meredid!!!
Ella voltea y Dennis me detiene porque ya me estaba levantando,
- Oye calmate, Marcelo trata de tranquilizar me. Fue inútil y cuando me desató de Dennis y Marcelo corri a donde estaba meredid,  y ya estoy frente del tipo a aquel que tenía su mano cogida el voltea y era quien menos creía

lo siento  no  debí  enamorarme ( ¡Editando!) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora