Lover boy ❤

Cómo te conocí

Kyle quien era tímido, inteligente, bajito, y con el pelo color almendra, estaba por ir a una de sus clases junto con uno de sus compañeros cuando de repente, ve a un chico en particulat, uno muy apuesto y sonriente (a decir verdad), pasar a su lado con otras dos personas que parecían hacerlo reír.

¿Quién es él?

Pensaba mientras se sonrojaba y comenzaba a caminar para alcanzar a su compañero.
-¿sabes cómo se llama ese chico de ahí? - le preguntó a su compañero.
-¿Ese? Se llama Tom Luckbone, de 3 de secundaria, parece buen tipo, aunque la mayoría de la escuela piensa que está involucrado en cosas muy malas, así que es mejor que no te juntes con él.

Son las 3 de la tarde, todo el mundo ya se ha ido a sus casas, todos excepto Kyle, quien estaba ocupado buscando el salón antes mencionado por su compañero.
-Tercero, tercero, tercero de secundaria, ¿por aquí?, no, una vuelta a la derecha...- se decía el chico mientras caminaba.
-... y si no me equivoco es, ¡POR AQUÍ!- levanto la cabeza y se quedó sin habla.

-¡ESE ESTÚPIDO HIJO DE PUTA!, si no me hubiera echado la culpa, no estuviera aquí limpiando este estúpido salón de mierda.- dijo Tom desde adentro del salón, mientras trapeaba con un notable enojo y escuchaba algo de música con sus auriculares.
A penas notó la presencia de Kyle, dijo:
-Oh, hola amiguito! ¿Estás bien? ¿Te perdiste? Ya es muy tarde para que estés aquí.

-Mierda- fue lo único que llegó a la mente del de segundo de secundaria.

-H~hola, me llamo Kyle, soy de segundo de secundaria, supongo que tú eres Tom, ¿verdad? Te ví el otro día y quería hablar contigo, aunque mi compañero dijo que eras una mala persona, pero yo no creo eso. E~es un placer- cerró los ojos un segundo y los volvió a abrir.

-¡Entonces, supongo que tengo carne fresca!- dijo Tom mientras hacía una expresión de maldad, de esas que reflejan la locura interna de un ser humano.
-¿Q~Qué?- dijo Kyle asustado.
-No te preoucupes, solo estoy jugando contigo.- Dijo el pelinegro, mientras reía. -Así que hablar, ¿eh?, está bien, solamente dejame terminar de limpiar, no me falta tanto.-
-Y~yo te puedo ayudar- dijo tímidamente.

-No, no, no, no, ¡vamos a estar los dos solos! ¡Ya estamos de hecho!-
Pensó.

-¿Seguro?- dijo, obteniendo por parte de Kyle un movimiento de cabeza aprobatorio -Está bien.-
Los minutos pasan y hay un silencio; un silencio muy cómodo.
Cuando por fin han terminado, Tom dice:
-Gracias por ayudarme- mientras guardaba dos escobas en el armario.
-No hay de qué- respondió Kyle.
-Así que hablar, ¿eh?, ¿hablar de qué?, a propósito, no me hagas caso si digo alguna que otra palabrota, es más o menos mi estilo.- prosiguió el de cabello oscuro, entre tanto buscaba algo en la mochila.
-Bueno~- A penas iba a hablar cuando Tom lo interrumpió.
-¿Sabes qué? Tengo un poco de dinero, ¿quieres ir a por un helado? Sería nuestra recompensa por trabajar tan duro, además pareces un buen tipo - dijo mientras le guiñaba un ojo y sacaba la lengua, haciendo que el segundo riera y respondiera con voz temblorosa:
-C~claro-