William se encontraba en su oficina de la orden. Una de sus subordinados le pidió permiso para entrar.
Adelante- la chica abrió la puerta, lleva un paquete.
Capitán William, le dejaron este paquete en la entrada de la sede- dice la chica dejando el paquete en el escritorio
¿Viste a alguien dejarlo?- la chica sacude su cabeza pero parecía estar pendiente por si el de la mascara iría a abrirlo.
Eso es todo puedes irte- da una sonrisa amable a su subordinada
Si capitán- La chica se retira y cierra la puerta de la oficina.
Abre la caja, frunció el ceño al ver otra caja adentro, realizó la misma función dos veces.
A lo ultimo se consiguió un peluche de lobo adorable, que lo hizo sonreír y abrazarlo
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Había una carta debajo del lugar donde estaba el peluche, dejo a un lado al lobo y la leyó.
Capitan de amanecer dorado he escuchado que le han recortado el sueldo a todos los capitanes, espero que este lobo sea de su agrado y le ayude a olvidar los infortunios de este reino
Atentamente, anónimo
Toco el papel con sus manos, la carta no era reciente. Agarro de nuevo el peluche y le beso la cabeza.
