Tócame | Vkook+18

capítulo 28

Taehyung fue a abrir la puerta confundido por la interrupción mientras que yo trataba de recomponerme. Él me había dicho que no había invitado a nadie lo que me tenía confundido porque, ¿quién era entonces?

Obviamente aquella visita me malhumoró, porque tenía planes y estos se vieron frustrados y maldición, como odiaba quedarme con la calentura.

Solté un suspiro saliendo del taller y una voz de niña resonó por todos lados, frunci las cejas.

Miré en dirección hacia la puerta y Taehyung ya la estaba cerrando, una niña de tal vez unos siete años detrás de él sosteniendo una mochila en sus hombros. Suspiré.

-¡Taeeee! -canturreó feliz, entonces entendí. Tal vez era su hermana o su sobrina. Taehyung la cargó en sus brazos dándole un beso y un abrazo.

-Lo siento por venir así, pero mamá saldrá a esas reuniones aburridas de gente mayor

-Ya veo, me tenían que haber avisado antes, estaba ocupado -dijo, su voz sonaba suave.

La dejó de nuevo en el suelo y ella me enfocó confundida. Apreté los labios no sabiendo si ella me podía o no ver ahí.

-¿Quién es él, Tae? ¿¡Es tu novio?! -chilló emocionada, sus ojos brillando.

Carraspeé incómodo y el calor inevitablemente fue a mi rostro, eso era lo último que faltaba.

El mayor rió y negó caminando con ella hacia mí. -Él es Jungkook, Soo. Es mi amigo, y trabaja conmigo.

-Hola Jungkook soy Somin -dijo acercándose hacia mí haciendo una leve reverencia y luego saludando con la mano y una sonrisa brillante, igual a la de Taehyung.

Me quedó claro que era súper educada, porque no todos los niños saludaban de esa forma, pero no me podía esperar menos de la familia de Taehyung. Que aunque no los conocía, sabiendo los modales que tenía él suponía que todos eran así.

-Hola, Soo. Encantando de conocerte -dije sonriendo cortamente hacia ella.

-Soomin es mi hermana, Jungkook y como ya escuchaste fue de imprevisto su visita, así que dejaremos el trabajo para otro día -dijo Taehyung tranquilo y yo asentí de acuerdo.

-¿Podemos comer helado con Jungkook, Tae?- preguntó jalando del pantalón del mayor, y él asintió.

-Ya sabes dónde están, ve por ellos -le respondió él de forma tranquila.

La niña no tardó en correr a quien sabe dónde.

-Lo siento, Jungkook-ah, no tenía idea de que venía. Si te sientes incomodo puedes irte y no me molestaré

-No para nada, ¿el que debería sentirse incomodo no tendrías que ser tú? -pregunté sonando casual y él negó con la cabeza acercándose a darme un beso corto pero delicioso en los labios dejándome aturdido.

-Te lo compensaré, lo prometo -dijo bajito cerca de mis labios. Yo asentí lamiendo mis labios, totalmente de acuerdo con que así fuera.

Con el paso de las horas, Soomin resultó ser muy agradable y muy educada. Comimos helado de forma amena y luego nos fuimos al sofá a ver televisión y algo mágico pasó. Taehyung dejó su mano por debajo de la sabana sobre mi muslo durante toda la película. Me sentía como una niña enamorada, pero no podía evitarlo si Taehyung era tan encantador cada vez más.