004.wildest dreams

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﹙ 𝐃i que me recordarás, de pie, en un vestido lindo. Mirando al atardecer, amor, mis labios rojos y mejillas rosadas. Di que me verás nuevamente, aunque sea solo en tus sueños más salvajes ﹚ 

Quería matarse, tener a Cregan frente a ella hacía que su corazón palpitara cada vez más rápido de los nervios

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Quería matarse, tener a Cregan frente a ella hacía que su corazón palpitara cada vez más rápido de los nervios.
No deseaba hablar con él, no quería hacerlo, pero ahí estaban, uno frente al otro, ninguno sin saber que decir.

─ Alyssa.

─ Cregan.

El castaño avanzó, queriendo acercarse más a la princesa, ella se quedó quita, sin saber muy bien que hacer.

No debía correr, no era una cobarde. Tampoco debía de mostrarse dolida con el echo de que dejó de responderle sus cartas, eso sería inmaduro.

─ Te ves muy...diferente ─ se tomó el tiempo de admirarla de cerca, a esa corta distancia podía apreciar sus pecas poco notorias, el largo de sus pestañas y el color miel de sus ojos.

─ Tú también ─ musitó, ¿Desde cuando la mirada de Cregan era tan intimidante?

─ No sabía que iban a venir, mi tío no me informó nada.

─ Mmm.

─ Me hubiese gustado recibirte al llegar, lo siento ─ hizo una pausa, Alyssa observaba cada movimiento, alerta ─ Pero ya estoy aquí.

Se acercó más a ella, tomando su mano.

─ Me alegra tanto verla, mi princesa ─ expresó, acercando su rostro en sus nudillos para dejar un beso ahí, como todo un caballero.

Alyssa sentía que se iba a desmayar.

─ ¿También le besaras la mano al príncipe Daemon?

─ ¿Tengo que hacerlo? No tenía idea...─ Alyssa soltó una risita, una risa que cautivó al joven lobo.

─ Era una broma ─ dijo con gracia, mientras empezaba a caminar, Cregan le siguió el paso.

─ Ya que estás aquí, podríamos ir, no sé, al viejo robl ─ fue interrumpido por su acompañante.

─ Estoy muy cansada, quiero ir a descansar ─ musitó, Cregan asintió, se sentía frustrado, no se veían en años y parecía que algo que algo había cambiado en su relación.

No parecía, algo había cambiado, y ambos sabían el porqué.

─ Está bien, entonces te escoltare a la cas...

─ Yo conozco el camino, no es apropiado que nos vean solos por los pasillos a estas horas.

Y ella se fue, dejándolo solo en medio del pasillo, Cregan sintió que Alyssa lo estaba evitando y él se moría por poder hablar de eso de una vez, y por un momento, sentir que era un tonto niño enamorado como antes.

loml ✶ cregan starkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora