Alex
Caminaba de la mano de mi amada Abi, subíamos las escaleras que nos llevarían a la habitación de ella...
Los recuerdos de mi niñez junto a ella, me invadían y me hacían sentir como en casa, fui muy feliz en esta casa, luego vinieron esas palabras tan dolorosas a mí...
Aún me duele...
Aún tengo la herida abierta...
La amaba como se ama a una hermana pequeña, la cuide, tanto como ella me permitió hacerlo, siempre procuraba guiarla, darle buenos consejos, nuestra amistad era única, pero como si no valiera nada, ella terminó todo.Yo no sabía de perdidas, ni de sufrir por alguien, aún no me había tocado llorar por alguien, pero Daniela me lastimo mucho, llore porque perdí a mi pequeña hermana, llore tanto tiempo porque sentía que jamás le importe, llore porque duele saber que tu cariño no es correspondido.
-Amor? Estas bien? - pregunta Abigail, me sonríe tiernamente y me abraza, al darse cuenta de que estoy por quebrarme.
-Dame un momento... Solo necesito un momento...- Digo soltando unas cuantas lágrimas, no me importaba que me vea llorar, ya me había visto muy mal y yo igual a ella, caí sentado en la escalera, llore como un niño, no sabía como superar lo de Daniela, así que reprimir y evite esto por años, y ahora regresaba ami con fuerza...
-Esperame, traeré un vaso de agua, te lo tomaras y cuando te sientas mejor, nos vamos, no te voy a presionar, será cuando te sientas preparado, amor... - dijo mientras tomaba con sus manos mis mejillas y después de besarme la frente se fue... Me quedé ahí, sintiendome bloqueado.
Entonces vi como la puerta de su habitación, se abrió... Se asomo con la silla de ruedas y se veía cansada...
-Alex... Estas bien? - dijo con tono de preocupación e intento levantarse, para ir donde estaba.
Me asuste y me levante rápidamente para no permitirle hacer eso, la ayude a sentarse otra vez, me miró y sonrió dejando caer lágrimas.
No pude evitar abrazarla, tuve que caer al suelo por que ella debía estar en esa silla, la abrace fuerte, y llore otra vez como un niño.
Imagina que no ves a tu hermana en varios años y que la última vez pelearon, luego te enteras que casi se muere, que estuvo en coma, y tienes ganas de ir, estar a su lado, pero no puedes... El orgullo, el miedo tantas cosas, y un día diversas circunstancias te llevan a esto...
-Perdóname Alex... - dijo en medio de sollozos.
-Porque me hiciste eso? Porque nos separaste? Me has echo tanta falta...-le solté, dejándola de abrazar y mirando sin poder ocultar mi enojo, pero a la vez estaba tan feliz por poder verla.
-Alex... Por favor necesito decirte tantas cosas, hablemos adentro, puedes empujarme, el subirme sola a esta silla, me ha dejado exhausta.
-Si, yo te llevo. - respondí, sin poder evitar mirar con tristeza, me daba pena ver a Dani así, sin poder caminar, su mirada había perdido ese brillo especial, se veía cansada, a pesar de haber descansado tanto... Triste, cuando debería estar feliz, de que Dios le dio otra oportunidad de vivir.
Mientras empujaba a Daniela, voltee a ver si venía Abigail, nos miramos y ella, entendió que debía dejarme hablar a solas con ella, se fue despacio sin hacer ruido, para que Dani no se de cuenta.
-Siéntate por favor Alex- Pidió mientras me señala a un puff rosado.
-Gracias, tu estas bien ahí? - Le pregunte, por si quería volver a su cama.
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💙 Brazos Abiertos 💙
Novela JuvenilTodo es por un propósito, no existen las casualidades y la amistad es un regalo de Dios que se debe cuidar, valorar y disfrutar. Abi y Dani nacieron el mismo día, ala misma hora y en el mismo lugar. Ambas con dos caminos diferentes y vidas poco simi...