Hush, Darling [Mo Dao Zu Shi / GrandMaster Of Demonic Cultivation]

Capítulo Único

Hush, Darling

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Wei WuXian saludó al tio Jiang y la señora Yucuando llegó a casa, Jiang Cheng ya estaba en casa también, seguramente en su cuarto, y su hermana debía seguir en el viaje, había partido en la mañana desde la región de LangLin, no la vería hasta dentro de un par de horas.

Con toda la normalidad que le fue posible obtener, abrió la puerta de su habitación, escuchando como el tio Jiang le decía que su comida estaba guardada en el refrigerador, él solo pudo responder que en unos minutos estaría listo, necesitaba cambiarse e iría a la cocina para calentar su almuerzo.

En cuanto la puerta se cerró, su cuerpo se desplomó, apenas sosteniéndose de uno de los muebles que estaban cerca para no caer directamente al suelo. Su corazón latía desenfrenado, sentía su cabeza dar vueltas y sus piernas estaban temblorosas. Su respiración se aceleró como si hubiera corrido una milla, el aire se reusaba a mantenerse dentro de sus pulmones, mientras su mente rememoraba la confesión de Lan Zhan, recordó el rostro de su amigo cuando dijo cada palabra, cada una de ellas.

No lo entendía, Wei WuXian no entendía que estaba pasando.

Hace una hora se encontraba realizando una de sus mejores actuaciones frente a cientos de alumnos que en su mayoría desconocía, incluso frente a su mejor amigo y en ningún momento sintió ni un poco de pánico escénico o miedo, realizó la coreografía a la perfección, ni un solo error, él amaba la atención de las demás personas, especialmente de su inexpresivo compañero. Recordó que su ánimo se elevó a un nivel superior en cuanto vio que Lan WangJi solo lo miraba a él. La actuación terminó siendo un gran éxito y sus compañeros junto a él fueron las estrellas del último show de la ceremonia.

¿Qué era esto?

Tenía miedo y felicidad al mismo tiempo, era una completa contradicción, nada tenía sentido. Y la sensación de escozor por todo su cuerpo no ayudaba a aclarar su mente.

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Su cuerpo estaba envuelto en un calor insoportable, la fiebre recorría hasta la última célula de su organismo y su cabeza se sentía terrible con el incesante martilleo que no parecía terminar. Intentó encontrar una posición más cómoda para dormir pero nada estaba funcionando, no podía conciliar el sueño con el malestar general que estaba padeciendo y la horrible picazón que pronto lo volverían loco. Odiaba estar enfermo y aislado de todos.

Su hermana había llegado desde LangLin hace una semana, junto a su esposo y su pequeño bebé para que todos pudieran conocerlo, era el fin del año escolar y acababan de darle vacaciones en su trabajo, era el momento perfecto para compartir tiempo con su familia. Todos estaban afuera disfrutando de buenos momentos y él solo podía retorcerse de dolor entre sus sabanas.

Jiang YanLi se había ofrecido para atenderlo durante el tiempo que durara su enfermedad, pero la señora Yu rechazó esta petición argumentando que podría exponer al pequeño A-Ling a un contagio más rápido y más aún porque todavía no había recibido la vacuna contra la varicela. Los alimentos y medicina eran dejados en una bandeja que estaba sobre un mueble cerca de la puerta, el tío Jiang era el encargado de cambiar sus sábanas y llevarle ropa limpia cada día, él simplemente no tenía ganas de nada, la enfermedad estaba drenando toda su energía.

Siempre tuvo a alguien junto a él, sus hermanos, el tio Jiang, sus compañeros de clases, sus amigos, Lan Zhan. Esta vez no había nadie para estar ahí acompañándolo, se acostumbró tanto a no estar solo que ahora que lo estaba, sentía un gran vacío en su pecho y un nudo en la garganta que solo agravaba su agonía.