El Niño idiota creyó idiota mente que hoy sería un buen día por qué recibió un mensaje de una persona que apreciaba mucho, y como siempre que hablaba con esa persona, por más idiota o corta que sea la conversación, termina siendo un buen día, el niño idiota pensó que este era un buen día, pero como era natural de un idiota, no pudo estar más idiotamente equivocado.
El niño idiota salió de paseo con su idiota familia, el niño idiota acepto idiotamente a pesar de saber que iba a terminar en una desagradable sensación de odio y desprecio hacia su idiota familia, y eso paso. Pero el niño idiota se armó de valor para no dejar que ese sentimiento actúara con sus valores, así que el niño idiota ayudo con las cosas idiotas que hacia su familia;
Puso una bugambilia, que era una hermosa flor, en una maceta; los idiotas de su familia le habían pedido mover la maceta mues estaba enterrada; el niño idita, sabiendo que esto era una idiotez por qué la maceta estaba en tan mal estado por qué nada más de agarrarla se destrozaba en sus manos, prefirió desenterrar únicamente una parte de su interior, idiotamente en lugar de agarrar otra maceta; cuando sembró la bugambilia en la maceta enterrada, idea que en realidad era idiota pues la maceta no estaba cometiendo su propósito, su idiota familia quedó muy complacida ante tal idiotez; eran idiotas, después de todo.
El idiota niño, pensando que tal vez debía ayudar a su madre quien estaba armando un sombra con postes de madera; cavaron unos hoyos y deshicieron errores que habían cometido por idiotas; cuando estaban colocando un poste de madera en uno de los hoyos, la madre mando al niño idiota por piedras; cuando las trajo, le encargó que las dejara en el poste, para sostenerlo, pero que no las aventara en el hoyo; el niño idiota, creyendo saber cuál es la diferencia entre aventar y dejar caer, dejo caer lo más cerca del poste, la piedra; el niño idiota creyo optimistamente que su trabajo estaba siendo completado correctamente, pues su madre no se quejo más de lo normal; el niño trajo más y más piedras, y cuando la madre le dijo que viera si estaba a la altura correcta, y vieron que no estaba a la altura correcta, la madre explico a su idiota hijo que era por qué había aventado las piedras, esto, mientras le explicaba también, lo idiota que era. El niño idiota, en su idiota mente, pensó idiotamente "pero no las aventé, ya que no aplique ningúna fuerza a la piedra; pero debo de ser un idiota al pensar que mi madre no sería una idiota al darme tan malas instrucciones". El niño idiota se puso triste por las cosas que su madre dijo. El niño idiota quería irse, pues no tenía razón para quedarse; no habían pedido su ayuda y solo iba a estorbar, pero su madre lo detuvo. Volvieron a hacer el trabajo y una otra vez, por qué el idiota niño no acomodaba bien el poste, el lo ponía en la posición "a" mientras que debía ir en la posición "b", pero el niño idiota explicaba que era idiota como para saber dónde era la posición b, y su madre le decía que no era cierto, hasta que se volviera equivocar, en cuyo caso le volvía a explicar lo idiota que era, y que la razón por la que ya había anoche ido antes de que pudieran terminar el trabajo, era por qué el había aventado aquella primera piedra. El niño estaba tan triste en este punto, que ya había soltado númerosas lágrimas; se sentía idiota al haber querido ayudar a su madre, pues siempre terminaba siendo un inútil para poder ser algo más que un objetivo de insultos. Si hubiera seguido fingiendo que es flojo delante de ella, ella hubiera terminado el trabajo, tal vez mejor, tal vez peor, pero no hubiera peleado con el.
Cuando el niño sucumbió a la frustración de la derrota y a los insultos de su idiota madre, grito en desesperación, pues el optimistamente creyó que su idiota madre podría tal vez escucharlo. Efectivamente, los gritos explicando la frustración lograron hacer que madre idiota dejara de gritar e insultar, pero la euforia del niño idiota no le dejaba recordar o procesar las palabras que salían de la boca de su madre; ella decía que ella no estaba gritando, pero si lo estaba haciendo hasta que el niño idiota grito. Ella decía que no lo estaba regañando, pero si lo estaba haciendo hasta que el niño idiota la tomo de las muñecas y le gritó en la cara. El niño idiota solo sentía así de enojado y furioso con su madre, y con nadie más, y ni siquiera a ella le haría daño. A pesar de eso, el niño idiota se asustó por qué pensó que tal vez si le haría daño, a pesar de que esa sería su acción y no la de su cuerpo, así que decidió alejarse. Una vez que ya no estaba gritando, su madre le explicó de nuevo como ella no era una idiota y el si, y le dijo que todo era su culpa de nuevo. El niño idiota pensó que aunque era imposible comunicarse con su madre por lo idiota que el era, al menos iba a dejar de insultar y regañar en ese momento.
El niño idiota dijo "por eso me quería ir antes de provocarte más problemas , pero no me dejaste" tal vez lo dijo entre dientes, tal vez lo dijo llorando, tal vez lo dijo gritando en una voz chillante e incomprensible, o tal vez su madre no podía entender tal idiotez, por qué ella contesto;
"Es que siempre huyes de los problemas, idiota. Te quieres ir cuando ya me dejas el triple de trabajo"
Y el niño idiota pensó idiotamente "Del único problema del que huyó de ti, por qué eres el único problema que en 16 años no he podido arreglar"
Y madre idiota siguió: "solo quieres hacer nada, nunca haces nada de lo que digo, haces lo contrario"
Y el idiota pensó;"Nunca entiendo lo que me dices por qué soy idiota, y cuando te pido una explicación, la única explicación que recibo es cuan idiota soy"
Y la madre expandió; "no has hecho nada en todo el día"
Y el idiota se dijo en su mente;"pero regué y sembré y salí a un viaje al que no quería ir, y luego te ayude por qué pensé que estabas haciendo las cosas , a mi parecer mal, y cuando logramos avanzar hasta este punto, me insultaste por mi idiotez"
Y la madre prosiguió; "solo quieres hacer nada y hablar con tus amigos"
Y el idiota reflexionó; "hablaría con mis amigos si me respondieran, pero nadie lo ha hecho últimamente, así que tiene razón, soy un idiota flojo"
Y la madre explico; "y hacer nada y jugar"
A lo que el idiota explico en su imaginación; "bueno, si no viera entrenar diseñar y sembrar y regar y vivir como un juego, me habría suicidado hace tiempo, así que tiene razón, soy un idiota flojo que no hace más que lo que quiere"
Su madre pronunció; "no estás con nosotros, no ayudas, no nada"
Y el niño idiota proceso; "no estoy con ustedes por qué me parecen idiotas y no me caen bien; no les ayudo si no me lo piden por qué siempre soy inútil y me terminan regañando si trabajamos juntos; siempre que te frustas, me gritas y me insultas"
Pero el niño idiota comprendió por idiotezima vez que decir algo de eso solo repetiría el ciclo, por qué los idiotas no escuchan ni deberían hablar.
Continuaron trabajando cometiendo estúpidos errores, pero al menos madre sintió una ignorante pena por el niño idiota, ya que parecía llorar por represión y tristeza y odio; sin embargo, el niño idiota lloraba por ideas euforia as mucho más complejas, ya había rechazado la idea de matarla, por qué era demasiado idiota para ocultar su cuerpo, y ya había rechazado la idea de huir, por qué era demasiado idiota para sobrevivir solo y además conservar sus estudios y amigos cercanos con buena posición económica.
Cuando terminaron el trabajo, al niño idiota le pareció que el poste había quedado en la posición "a" y lejos de la posición "b", pero el sabía que era demasiado idiota para saberlo a ciencia cierta entre tanta oscuridad. Quería escuchar un perdón o un gracias de su madre, pues le había ayudado sin que ella le pidiera, a pesar de que el era idiota e inutil, el creía que su idiota e inutil esfuerzo merecía eso. Pero el idiota niño pronto se dio cuenta que los idiotas no saben pedir o dar gracias, ni pedir o dar perdón. Por idiotezima vez, el niño idiota recordó por qué no ayudaba a su madre si no se lo pedía, pero sabía que sería un error que repetiría. Se retiró después de bañarse, a su cuarto, muy , muy lejos, del cuarto de su madre. Dónde puede gritar llorar y bailar, sin que nadie le diga lo idiota que es, más que el mismo
