Capítulo 15.

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2 MESES DESPUÉS

 

31 de Diciembre.

Narra Paula: 

Eran las 12:35. Dani no daba señales de vida, es raro que a estas horas no esté despierto ya que siempre se solía despertar cuando Jesús lo hacía. La verdad, a mí y a Dani nos iba bien, llevabamos 2 meses  y Andrea y Jesús habian comenzado a salir el mes pasado. Nuestros padres estaban al tanto de la situación y la verdad que se llevan bastante bien. Hoy es fin de año, así que seguramente cenaremos en la casa de los gemelos. Decidí vestirme. Me puse unos leggins negros y una sudadera de Boy London, acompañada de mis Air Force. Una vez vestida, fui a la habitación de Andrea  y dí varios porrazos en la puerta con mis nudillos.

+Entra.

Para mi sorpresa, me encontré allí a Jesús. Estaban tumbados en la cama, el sentado apoyado en la pared y ella  echada en su cintura.

-Hombre, buenos días, desde por la mañana juntos eh, que empalague.

Los dos rieron y Jesús movió su cabeza hacia los lados, en modo de negación.

+Tengo por seguro que ahora mismo vas a ir a buscar a Dani, ¿me equivoco?-Me miró mientras una sonrisa cínica aparecía en su rostro.

-Anda y te callas niño.- Dije mordiendome el labio inferior, con  verguenza.

+Ve a buscarle anda, seguro que está dormido y así se despierta con buen humor, por que tiene unos humos cuando se levanta....

Hice caso y salí por la puesta mientras les decía adiós.

A los 10 minutos ya estaba frente a la puerta de la casa de los gemelos.

La verdad me daba bastante corte aparecer en su casa así por la cara, estaba dudando si pegar o no cuando se abrió la puerta.

+Hombre, ¡Paula! ¿Cómo estas?

-Buenas tardes Carlitos, ¡Me alegro de verte!

+¿No me vas a dar un abrazo?- Dijo mientras hacia pucheros y abria sus grandes brazos.

Me enganché a él mientras rodeaba su cintura con mis manos y le achuchaba fuertemente.

Siempre le había tenido un especial cariño a Juan Carlitos, desde que conozco a Dani y a Jesús, nos a tratado a Andrea y a mí como si fuesemos sus hermanas. Cada  vez que Juan Carlitos volvía de Londres, siempre los cuatro le solíamos invitar a comer. El siempre nos cubría de todas las broncas de nuestros padres y nos escuchaba y ayudaba cuando lo necesitabamos.

+¿Qué te trae por aquí cuñadita?

-Venía a buscar a Dani, que no dá señales de vida..

+Uy, ¡Pues pasa hija, ya sabes donde esta su habitación!

-Gracias Carlitos.- Le dí un beso en la mejilla y subí las escaleras para ir a la habitación de Dani.

Me lo encontré en el pasillo, en dirección al baño. Sin camiseta y con unos Boxers de Calvin Klein. 

Me encantaba verle así, despeinado y con su cara de recien levantado.

Me miró.

Le miré.

Nos miramos.

Y me tiré a sus brazos.

+Buenos días mi niña.- Me cogió de la cintura, acercandome a él mientras yo rodeaba su cuello con mis brazos y depositaba un pequeño beso en la comisura de sus labios. 

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⏰ Última actualización: Jan 01, 2015 ⏰

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Mi sur, mi norte y mi agonía. (Daniel y Jesús Oviedo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora