Tan solo espero para que ya no estén aquí.
Espero silenciosamente para poder dejar salir mis lágrimas resguardada, lagrimas cargada de angustia, vacío, miedo profundo, miedo a fallar de nuevo con demasiados sentimientos guardados como para querer tan solo desahogarme. Un par de hojas, junto a unas cuantas gotas de tinta, y así libero mis cargas, tal vez no sea la correcta, pero mis escritos van dirigidos a alguien, esa persona eres tu Señor, mi papá.
Gigante carga es la que llevo, pesadez emocional, un cansancio eterno, lucho por mantener mi mente despierta para que no duerma en medio del caos, mientras mi espíritu casi ni lucha, casi ni pelea por las duras batalla, solo pelea cuando una emoción la anima salir al ring de boxeo, mientras ese lugar solo lo ocupa unas cuantas neuronas de mi cerebro y la sociedad llamada Familia.
¡Cuánta pesadez habita en mí, cuanto esfuerzo por querer hacer las cosas bien!
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El diario de una inconstante.
SpiritualSiempre llega ese momento donde deja de llover dentro de ti, deja de ser una tormenta, dejas de ser una esclava de temores, dejas liberar tu mente, porque entiendes que el destino no cambia, los caminos... Seguirán siendo caminos, con sus maravillos...