¿Y cómo no amarte? (COLOMBIA)

capítulo 17 : roja como la sangre

Todos se fueron después de un rato, incluso Rusia que salió rápidamente del shock del momento, mirando a todos lados, organizó su traje e intentó salir de ese lugar de una buena vez, al voltear sus ojos chocaron con los de México que estaba esperando una respuesta a esto, pero no sucedió nada, Rusia salió de la sala con un ligero sonrojo en la cara y las orejas.
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México llegó a su casa para quitarse la corbata y al tenerla en sus manos la arrojó enojado hacia la pared, ¿pero enojado porque? ¿Era por Rusia o por Colombia? ¿Era por el hecho de que Rusia le juraba amor eterno pero no era así o por qué Colombia beso a Rusia? Calló en cuenta que era lo segundo, repasando todo, estaba extrañamente emocionado por que Colombia le escribió sobre qué lo quería ver, incluso cuando se echaban algunas miraditas en la reunión haciendo caras estupidas, todo esa felicidad se fue a la mierda cuando sucedió ese incidente y lo único que quiso hacer fue querer matar a Rusia

-¿será lo que me dijo ONU es cierto, que yo...?

Pero fue interrumpido por el sonido de un mensaje, al ver de quién era su corazón dio un latido más fuerte que los anteriores y rápidamente contestó

Y ahí estaba ese sentimiento de felicidad, pero le resto importancia y se fue directo a cambiarse de ropa

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El ambiente del bar era relativamente tranquilo, no se veía mucha gente así que no tomó mucho tiempo encontrarse y empezar a hablar mientras se tomaban unas cervezas, a México le picaba la lengua de preguntar el porqué lo hizo pero el otro país le adelantó la respuesta

-era eso o pegarle en el estómago para que se callara

México hubiera preferido lo segundo

-pero el Man me cae bien, es medio fastidioso pero todo bien

-¿entonces yo no te caigo bien?

-es que usted empieza con sus maricada, pero fresco, yo a usted lo amo mucho parce

México sintió su corazón latir más fuerte y contestó siendo más rápida su boca que su cabeza

-y yo lo adoro, a ti y tus nalgas

-tan bobo-Colombia le acaricia la pierna a México- pues vos no se queda atrás, lo que más me encanta de sumerce son sus piernas, gruesas gruesas

México se sentía raro, pero le encantaba esa sensación tanto que empezó a dar suaves caricias al cabello de Colombia

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Rusia llegó al bar, quería pasarse ese sentimiento de encima con unos tragos hasta que vio a los otros dos países, en su versión humana hablando en la barra, uno de ellos,que pudo deducir como Colombia, tenía la mano en la pierna contraria, y el otro que era México tenía una de sus manos en el cabello del otro, Rusia sin pensarlo se fijó en los labios que lo besaron horas antes, suaves y cálidos antes de querer enojarse con Colombia al estar de coqueto con México.

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-¿dónde estuviste y que has hecho?

-he tenido una que otra vaina en mi territorio, tú sabes como es

-pues nos tenías preocupado

-¿ONU no les dijo?

-no wey

-ñeda, bueno, tal vez se le olvidó

Se la pasaron bebiendo, México ya parecia que se encontraba borracho, aunque Colombia no recordaba que México tuviera poca resistencia al alcohol, tal vez por qué hace rato no bebían y él estaba tomando en silencio,disfrutando el sabor del alcohol en su boca, hace rato que no tomaba, todo esto siendo visto por Rusia en una mesa un poco más apartada, si se pudiera describir a México cuando se encontraba en estado de embriaguez pues, es el típico borracho que hace lo que se le viene a la mente, tanto que el propio México ya conocía como era