Tyner
Bajo de mi moto, llegando a una de las tantas empresas de Vinicio, que sirve como pantalla para la cantidad de negocios oscuros que hay por aquí. Entro al edificio, dirigiéndome a la recepción. La secretaria me sonríe como siempre, entonces yo hago lo mismo. Voy a preguntar por mi amigo, cuando soy interrumpido. Alguien detrás de mí, toca mi chaqueta con su dedo, unas dos veces, me giro y veo esa hermosa figura. La bella rubia de la otra vez.
―Keyla ―Qué bien suena su nombre en mi boca.
Aunque sinceramente no entiendo cómo es que está aquí. No la vi nunca y ahora aparece como si nada. Supongo que como Vinicio ya sabe que la conozco, ya no tiene razón para ocultarla.
―Tyner Verol ―Sonríe.
Siento que hay mucha química aquí, lástima que no hay física.
―Sigo sin saber de dónde me conoces ¿Vinicio te habló de mí? Debería ser la respuesta más obvia, pero no me la creo.
―Eres una cuenta pendiente ―Puedo notar el brillo en sus ojos cuando me observa, es un sentimiento que no quiere mostrar.
Me intriga.
―¿Y eso qué significa?
―No importa ―Toca mi corbata un momento, la suelta despacio y suave mientras se gira en dirección al ascensor.
―¿Vienes a ver a Vinicio? Yo llegué primero, primor.
―Lástima ―Me observa un segundo y revolotea las pestañas de manera coqueta.
Camino a su lado y sigue el paso.
―¿Cómo es que puedes ir por ahí? Eres una prostituta, ¿o acaso estoy equivocado?
Se ríe.
―Sí, lo soy, pero Vinicio me tiene confianza y aparte tenemos un trato, él sabe que no deseo escapar.
―Interesante ¿Puedo preguntar por qué me lo dices con facilidad? Creí que eras más cautelosa.
Hace otra risilla que me vuelve loco.
―Quizás porque me tienes hechizada.
Mierda.
―Deberías dejar de coquetearme ―Me muerdo el labio.
―¿Por qué? ―Se detiene a tocar el botón del ascensor y yo me quedo quieto a su lado.
―Porque siento que voy a empotrarte contra la pared y voy a darte duro hasta que desfallezcas, pero teniendo en cuenta que eres la prostituta de mi amigo, lamentablemente no puedo hacer eso.
Se carcajea.
―Fácil, paga.
―No, eso va justo a mi orgullo de mujeriego.
Frunce el ceño molesta.
―Lo sé.
―No entiendo por qué te enfadas, ni me conoces.
Sonríe de nuevo.
―Sé más de ti que de cualquiera, exceptuando la parte en la que participabas en esta mafia.
―¡Uf! Me intrigas cada vez más.
―Digámoslo así ―Toma mi corbata otra vez y se acerca a mi rostro ―. Estoy obsesionada contigo, Tyner Verol ―Se muerde el labio.
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Perversa Oscuridad: Reina
AksiSecuestrada, obligada a estar en la prostitución, pero Keyla no solo buscará sobrevivir en ese calvario, también intentará ser la reina de este y cumplir su venganza. "Estuve esperando cautelosa para hacer mi jugada". Libro independiente de Perversa...