14 Hay más peces en el mar

113 8 8
                                    


"I had to find you

Tell you I need you

 Tell you I set you apart."


El amanecer, las horas pasaban lentas, veía desde la ventana como el cielo cambiaba del azul oscuro a un celeste combinado con violeta, la claridad se daba paso y todo se comienza a distinguir. Se escuchaba desde lejos el canto de los pájaros, y como la ciudad despertaba, los claxon de los autos, algún que otro loco que pasaba con música a alto volumen y en el piso de abajo como prendían una licuadora, el aroma del café de la mañana llego suave a mi habitación y Puma maulló buscándome, quería comer.

En un estado que podría llamarlo como adormecida, me dirijo al mueble busco sus croquetas y las pongo en su plato. Ha llegado otro día, dentro de un momento tendré que levantarme y comenzar con todo sin embargo no puedo, no he logrado acomodar mis sentimientos, estos todavía me mantienen despierta en la noche, la historia de un amor perdido aparece en mis sueños, una persona que no he podido olvidar.

-¿Ya te despertaste?- interrumpe Cecilia en mi habitación.

-No, sigo durmiendo- contesto tapándome con la sabana.

-¡He contratado niñera!- me dice alegre acercándose a mi cama- hoy vamos a ir de compras.

-¿Estás dejando a tu hija con una extraña para ir de compras?- le dije descubriendo mi rostro.

-No es cualquier niñera, esta súper recomendada, recuerda que siempre las mando a investigar- dijo jalándome fuera de la cama- además necesitas salir de aquí, darte un baño y conocer gente nueva.

-¡Oh Señor! ¡No!- respondí- ¡No quiero saber de los hombres por un largo tiempo!

-Dani- dijo cariñosa- ¿Recuerdas la frase "Hay más peces en el mar"?

-Si.

-Pues es cierta, por eso debemos salir- dijo concluyendo y lanzándome al baño.

-Pues es cierta, por eso debemos salir- dijo concluyendo y lanzándome al baño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


La Quinta Avenida era una de las calles más famosas de Nueva York, tiendas exclusivas, un río de turistas, personas que iban a trabajar caminando rápido, taxis amarillos, y Cecilia llevándome de una tienda a otra emocionada.

-Cecilia, no quiero hacer esto- dije al entrar al vestidor de damas.

-Vamos Dani, no seas aguafiestas.

-Nunca encontraré nada para mí.

-Claro que sí, vamos pruébate estos - dijo dándome un pequeño Top lleno de lentejuelas, un par de vestidos, faldas y jeans.

-No creo que me sienta cómoda con esto- dije señalando el top.

-El punto no es sentirse cómoda sino llamar la atención- contestó Cecilia paciente.

La Primera Vez en Nuestras Vidas © TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora